Inoperante y mediocre
Así podríamos calificar la actuación del Puebla de La Franja la noche del sábado en Cancún frente al Atlante, y es que de verdad es desesperante ver la manera en la que el profesor Trejo mueve a sus jugadores, todo esto por supuesto después del «osote» realizado por Yasser Corona al introducir el balón en su propia portería cuando no tenía a nadie a su alrededor, y después también de la innecesaria expulsión del «Chícharo» González en media cancha quien con su «estupidez» echó al bote de la basura el trabajo del grupo de toda la semana.
Dos jugadas, dos desatenciones, dos pestañeos, y el juego estaba liquidado, sin embargo lo más lamentable del asunto radica en que quedó demostrado que después de Félix Borja en el equipo Puebla ningún delantero es confiable para José Luis Trejo, es cierto, Borja se lesionó el jueves de la semana pasada, se sabía que era muy factible que no pudiera estar y se optó por habilitar a Gabriel Pereyra como eje de ataque, algo parecido a lo que sucedía el torneo anterior (cuando no se tenían jugadores), sin embargo ahora queda la duda de por qué teniendo en la banca a jugadores como Nelson «Pipino» Cuevas, Aarón Padilla y Brayan Martínez, no se les tenga confianza.
La decisión de traer al «Pipino» fue total y absoluta responsabilidad de Trejo, entonces ¿por qué no lo mete?, ¿acaso no está en condiciones de jugar más de diez minutos?, de ser así ¿para qué lo trajo? son preguntas que quedan en el aire y que el técnico tendrá que aclarar, pues es increíble que después de toda la gente que se trajo se siga jugando prácticamente igual que el torneo anterior, obviamente, y debo decirlo, no toda la responsabilidad cae en la persona de Trejo, porque honestamente qué se puede hacer cuando un «Chícharo» González se hace expulsar al minuto 33 de primer tiempo, o cuando Yasser Corona mete un autogol de kíndergarden, es obvio que todo se descompone, sí, pero es su responsabilidad meter a los jugadores que estén en mejores condiciones y no a los que tengan mayor jerarquía, a mí me da la impresión que se está respetando en exceso los nombres, que también los cambios tardan mucho en llegar y que en la alineación inicial se les están buscando tres pies al gato, cuando insisto, a mi parecer, debería de ser mucha más clara y menos enredada, por derecha deben ir Orlando Rincón y Rodrigo Salinas y por izquierda Yasser o Guillermo Cerda con Edgar Castillo y así vuelves fuerte ambos lados, como están ahora, créame, ni uno ni otro.
Ahora vienen los Pumas el próximo fin de semana, y bueno, si el equipo no es capaz de sacar puntos fuera de la Angelópolis ojala se vuelva fuerte en casa y logre cosechar los puntos necesarios para crecer de a tres cada quince días; partido complicadísimo que sin duda generará un lleno hasta las lámparas en el Cuauhtémoc, ojala para ese día ya esté Borja y se ponga a cada quien en su lugar, veremos y diremos.
Cambios en Lobos
Después de la turbulencia de la semana pasada donde los señalamientos de la fractura entre el director técnico Gustavo Moscoso y varios jugadores fueron desmentidos por ellos mismos, la razón vuelve a asistir a este espacio, y quedó confirmado que a pesar de la molestia que les causó a algunos las versiones aquí vertidas, son más que ciertas.
Al minuto quince del primer tiempo los universitarios ya perdían tres por cero, el marcador final terminó 4-1 y con eso seguramente la participación de Moscoso como responsable del equipo, quizás él no sea el culpable al 100 por ciento, pero como siempre en el futbol el hilo se rompe por lo más delgado, y es que después de tres descalabros consecutivos y doce goles en contra, parece que no queda de otra.
Apunte usted a Juan Alvarado, Roberto Ruiz Esparza, y Gilberto Jiménez como las posibilidades más fuertes de tomar el mando, seguramente el día de mañana uno de estos tres será presentado para así darles gusto a los jugadores inconformes. Nosotros como siempre seguiremos en línea. Hasta la próxima.