En la medida que se acerca la definición del proceso interno de Morena para elegir candidato a gobernador, dos son los aspirantes que se han despegado del resto del pelotón: el senador Alejandro Armenta Mier y el diputado federal Ignacio Mier Velazco.
Los demás aspirantes —Julio Huerta Gómez, Claudia Rivera Vivanco y Olivia Salomón Vivaldo— han comenzado a rezagarse e incluso alinearse a los dos punteros, lo que nos lleva a pensar que seguramente sí serán candidatos en el 2024, pero no a la gubernatura.
Lo anterior no es sólo una percepción de quien escribe estas líneas, sino una realidad que pueden suscribir presidentes municipales y diputados locales, que han tomado distancia del exsecretario de Gobernación, Julio Huerta, y cuadros del PRI, el PAN y el PRD que han ido engrosando los cuarteles de Armenta y Mier.
Este lunes, por ejemplo, el integrante de la Comisión Permanente del PAN y aspirante panista a la gubernatura en 2016, Marco Antonio Ramírez Moreno “La Cosa”, manifestó su respaldo al senador y aspirante de Morena al gobierno del estado Alejandro Armenta.
Ramírez Moreno dijo que fue invitado al proyecto de Armenta por Jesús Morales Rodríguez, excandidato a diputado federal del PAN en 2021 por el distrito de Tepeaca y exsecretario de Seguridad Pública en la gestión del gobernador José Antonio Gali Fayad.
Con el diputado Mier Velazco están otros exoperadores panistas que no tuvieron cabida en el ayuntamiento de Puebla o se distanciaron del presidente municipal Eduardo Rivera Pérez y su grupo político como Clemente Gómez Medina y Jacobo Ordaz Moreno, y el expresidente municipal de Atlixco y aspirante del PAN a la gubernatura, Guillermo Velázquez Gutiérrez.
La lista de simpatizantes y operadores del PAN, en las gestiones de Moreno Valle y Gali Fayad, que hoy están metidos de lleno en la campaña de Ignacio Mier es vasta y será motivo de una próxima entrega.
Sin embargo, Armenta y Mier deberían saber que en la medida que sigan distanciándose y dinamitando la posibilidad de un arreglo en aras de la unidad de Morena y sus aliados de la 4T, un tercero o mejor dicho una tercera podría ser la beneficiada.
De hecho, creo que las insistentes versiones difundidas por la columna Bajo Reserva de El Universal, en el sentido de que en Puebla la cuota de género podría favorecer a una mujer, tienen ese propósito.
El objetivo de hacerles entender que, si siguen excluyéndose y polarizando a la militancia de Morena y a la sociedad poblana, sin visos de construir un pacto de unidad o negociar una ruta en la que ambos puedan transitar sin poner en riesgo la continuidad de la 4T, una mujer podría ser la favorecida.
Y en ese contexto se inscribe, creo, el encuentro del presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Ignacio Mier, con la exalcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, en el portal Hidalgo del zócalo citadino, en el cual el primero le alzó la mano como muestra de unidad.
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