Milagro presidencial en la UPN
El director general de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) de Puebla, Pedro Valdés Martínez, había convocado este miércoles a una asamblea general con la intención de reelegirse para un segundo periodo o nombrar como sucesor a Eliú Rodolfo Fernández Argüelles, o a Benigno Romano Romano, quienes actualmente se desempeñan como subordinados suyos en la Subdirección de Planeación y en la Subdirección de Investigación, respectivamente.
A sabiendas de que su periodo concluye el último día de mayo y a que la tradición, desde hace nueve años, es nombrar al director de la UPN mediante una asamblea de maestros —pese a que esto es facultad directa del secretario de Educación Pública del estado—, Pedro Valdés planeaba un madruguete.
Por esa razón había citado este miércoles a los profesores del plantel de Puebla y de las subsedes regionales de Acatlán, Atlixco, Cuetzalan, Huauchinango, Izúcar de Matamoros, Zacapoaxtla y Zacatlán, a una asamblea que iniciaría a las 16 horas.
Y digo iniciaría porque en la víspera un alto funcionario, o funcionaria, de la SEP se comunicó con él para exigirle suspender la asamblea, lo que finalmente hizo usando como pretexto la presencia del presidente Felipe Calderón Hinojosa en el Complejo Cultural Universitario de la BUAP.
Incluso confió a sus más allegados que el presidente Calderón lo había invitado a ser testigo de la firma del Acuerdo para la Reforma de los Lineamientos del Programa Nacional de Carrera Magisterial, que este miércoles suscribió en Puebla con la presidenta nacional del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales.
Pero lo cierto es que desde la SEP se ordenó la suspensión de la asamblea, durante la cual —con el apoyo de los profesores hora-clase de las subsedes regionales y sus incondicionales de Puebla— trataría de reelegirse o imponer como sucesor a Eliú Rodolfo Fernández, como primera opción, o a Benigno Romano, como segunda.
En los corrillos de la SEP y la UPN se dice que Pedro Valdés ha intentando vender la idea de que su subdirector de Investigación, Benigno Romano, es un sujeto capaz de construir consensos incluso con aquellos docentes que se muestran críticos a su gestión.
Esta situación no es del todo cierta, pues a raíz de lo aquí publicado el pasado viernes sobre este personaje, se han acercado profesores de la UPN, quienes aseguran que Benigno Romano pasó de noche como subdirector de Investigación debido a que la mayor parte de su tiempo estaba en la Secretaría de Salud, donde tiene o tenía una plaza de tiempo completo, y que su maestría es un fraude académico.
“El único evento académico que organizó, el Congreso Nacional de Educación en el 2009, fue un rotundo fracaso porque lo convirtió en un acto de proselitismo político a favor de Mario Marín, lo que fue duramente criticado en el Consejo Nacional de Investigación Educativa de las Unidades UPN a nivel nacional.”
“Benigno Romano obtuvo el grado de maestro gracias a que el director de la UPN, Pedro Valdés Martínez, integró una comisión de titulación ex profeso, al margen de la normatividad, con docentes ajenos a la planta académica de postgrado y sinodales que fueron presionados laboralmente para que aprobaran una tesis mal escrita y carente de rigor académico que aún puede consultarse en la biblioteca de la institución.”
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Simón dice:
“La falsedad tiene alas y vuela, y la verdad la sigue arrastrándose, de modo que cuando las gentes se dan cuenta del engaño ya es demasiado tarde.”
Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) Escritor español.