La guerra de encuestas que se ha desatado en Tlaxcala en el marco de la sucesión gubernamental está generando confusión, desánimo e incertidumbre entre los ciudadanos y las ciudadanas que ya no saben si creer o no en los resultados que se dan a conocer a través de diferentes estudios demoscópicos que son realizados por varias empresas.

 

 

La información disponible y que se ha dado a conocer refleja parte de la realidad que impera en el actual proceso electoral de Tlaxcala, es decir, es cierto que la coalición “Juntos Haremos Historia” que encabeza la morenista Lorena Cuéllar Cisneros encabeza las preferencias y que en un segundo lugar se ubica la candidata priista de la alianza “Unidos por Tlaxcala”, Anabell Ávalos Zempoalteca.

 

Aunque no hay consistencia en la diferencia que la primera tiene sobre la segunda, porque algunos estudios refieren que es de más de 20 puntos porcentuales y otros que ésta es de 6 a 10 puntos porcentuales, en las encuestas que ambas candidatas han contratado y que no se han dado a conocer públicamente se dice que la morenista aventaja entre 12 y 17 puntos a la priista.

 

Otro hecho que también reflejan las encuestas publicadas y difundidas en diferentes redes sociales, es que Anabell Ávalos ha mantenido en las últimas semanas un crecimiento constante en las preferencias electorales y que de seguir así estaría en condiciones de acortar la diferencia con Lorena Cuéllar.

 

Los análisis de prospectiva que han realizado diferentes empresas sobre las 15 gubernaturas que están en juego en el país, refieren que Morena podría ganar en las elecciones del próximo 6 de junio entre ocho y diez entidades, siendo Tlaxcala una de ellas, pues siempre es incluida en los estados que el partido del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, espera controlar a partir de que se realicen las votaciones constitucionales.

 

La empresa que dirige el ex consejero del IFE, Luis Carlos Ugalde, proyecta que Morena y sus aliados perderán la mayoría calificada en la Cámara de Diputados (dos tercios de las curules), pero lograrán la mayoría absoluta (50 por ciento más uno), lo que llevará al presidente López Obrador a perder la capacidad de enmendar sin problemas la Constitución.

 

En cuanto a las gubernaturas, el reporte electoral de la Consultora Integralia, establece que Morena tiene posibilidades de ganar 10 de las 15 que están en juego, siendo estas Baja California, Campeche, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.

 

Para Luis Carlos Ugalde Tlaxcala no es una entidad desconocida, pues se involucró en los comicios del 2016 cuando su amigo, el actual gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez, lo contrató como asesor de la campaña priista, de ahí que si alguien sabe del arrastre y del alto nivel de competencia que tiene Lorena Cuéllar como abanderada de la coalición “Juntos Haremos Historia” que integraron Morena, PT, PVEM, Nueva Alianza y el PEST es precisamente él.

 

Considero prudente aclarar que no estoy diciendo que las elecciones en Tlaxcala ya están definidas y que Lorena Cuéllar tiene asegurado su triunfo, simplemente hago referencia a las proyecciones y pronósticos que varias empresas como la Consultora Integralia hacen sobre los futuros resultados que se podrían dar el 6 de junio.

 

Me parecería un grave error desechar desde ahora la posibilidad de un probable triunfo de la candidata priista de la alianza “Unidos por Tlaxcala”, Anabell Ávalos, pues su estrategia y campaña van funcionando y aunque aún le falta crecer en las preferencias electorales, no descarte que en los siguientes días se ubique en una posición que ponga más nerviosos a Morena y a su abanderada.

 

Por lo pronto no descarte que en los próximo días se rompa el pacto de no agresión y aumenten las hostilidades entre los equipos de las principales candidatas a la gubernatura de Tlaxcala previo al debate del próximo domingo, sobre todo porque hay varios y serios indicios de que las autoridades estatales tienen metidas las manos en las elecciones locales.

 

El proceso electoral se va a empezar a calentar.

***********************************************************************************************************************