El ritual para que se consuma la designación de Anabell Ávalos Zempoalteca como candidata a la gubernatura de la coalición “Unidos por Tlaxcala” sigue su marcha y será a más tardar el próximo fin de semana cuando el PRI, PAN, PRD, PAC y el PS confirmen su actual decisión, la cual podría ser cuestionada por la aspirante panista Minerva Hernández Ramos, quien se resiste a aceptar que la priista logra el consenso, goza de un mejor posicionamiento y es más competitiva rumbo a los comicios del 6 de junio.

La ex alcaldesa capitalina lleva meses construyendo y negociando la conformación del bloque opositor amplio que también fue avalado y alentado por el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez, quien sabe que la única forma de dar pelea por la gubernatura del estado a Morena y sus aliados es a través de una mega alianza y con una candidata altamente competitiva como lo es Anabell Ávalos.

 

El marcado activismo que en los últimos días ha llevado a cabo la senadora panista Minerva Hernández que lo mismo presume fotos con el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas que con el dirigente del CEN del PAN, Marko Cortés Mendoza, hace suponer a uno que otro que tiene algún chance de encabezar a la mencionada coalición, sin embargo no es así porque el trámite para ungir a Anabell Ávalos sigue y sólo falta esperar la fecha fatal para concretar tal decisión.

 

Anabell Ávalos ha mantenido un bajo perfil en estos días no porque esté confiada o porque haya dejado de operar como lo venía haciendo desde hace meses, sino porque la priista dio positivo a Covid-19 y se encuentra en confinamiento para seguir el tratamiento que le permita superar a la brevedad esa enfermedad.

 

De acuerdo con el reporte que cada día la Secretaría de Salud envía a la oficina del gobernador Marco Mena, se sabe que la ex presidenta municipal de Tlaxcala presentó algunos síntomas los primeros días de este año, de ahí que se practicó la prueba para detectar el virus que le fue confirmado el pasado 6 de enero.

 

La priista se encuentra estable y en observación. El tratamiento médico es favorable y se espera que en breve se encuentre recuperada totalmente para seguir avanzando con su proyecto y seguir creciendo en las preferencias electorales a fin de ubicarse en la zona de competencia antes del arranque oficial de las campañas que se tiene previsto para el próximo 4 de abril.

 

Minerva Hernández ha aprovechado la obligada ausencia de su contrincante y sin duda ha logrado en los últimos días una mayor presencia mediática, pero el problema para esa legisladora panista es que la decisión que ya tomaron cuatro (PRI, PRD, PAC y el PS) de los cinco partidos que integran la coalición “Unidos por Tlaxcala” para respaldar las aspiraciones de Anabell Ávalos no cambiará.

 

Los adversarios políticos de Lorena Cuéllar Cisneros, virtual candidata del Morena, el PT, el PVEM, el PEST y Nueva Alianza saben que unidos y con el impulso de una figura como Anabell Ávalos pueden competir y hacer realidad su deseo de impedir la llegada al poder de la ex priista que se hizo responsable en los últimos días años de los programas de desarrollo del gobierno federal que encabeza el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.

 

La animadversión entre Anabell y Lorena no es nueva y tampoco pasa desapercibida para la clase política de Tlaxcala. Aunque han coincidido en posiciones de poder y han mantenido la civilidad, sus diferencias son muy grandes y será cuestión de tiempo para que sus equipos rompan lanzas.

 

La sucesión de Tlaxcala con aroma de mujer no será tersa.

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