El que nunca ha tenido y llega a tener loco se quiere volver, es un viejo refrán que bien podría aplicarse a un diputado local que sus excesos y abusos lo están encaminando no sólo a perder la confianza y el poco respeto que aún tenía, sino que está a un paso de ser removido del principal órgano de gobierno del Congreso del Estado por sus actitudes y poses de gran político que insiste en tener.

 

El intrascendente legislador presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política y actual líder estatal del Partido Encuentro Social Tlaxcala (PEST), José Luis Garrido Cruz, anda insoportable y gastando lo que no es suyo con tal de mostrar una fuerza y presencia que sólo su amplio séquito de lambiscones le ve.

 

De los diputados locales que han ostentado la presidencia del mencionado órgano de gobierno de la actual Legislatura, el también representante de un grupo de pastores cristianos es el que más empleados ha contratado y por lo tanto el que más ha costado a las finanzas del Congreso del Estado.

 

Se calcula que en la oficina de la Junta de Coordinación y Concertación Política laboran alrededor de 15 personas que sólo por el hecho de estar a las órdenes de Garrido Cruz desayunan y comen en el comedor del Congreso local, de ahí que los tlaxcaltecas no sólo pagan los exquisitos gustos culinarios de los diputados, sino de los allegados de ese legislador que también aprovecha esas instalaciones para degustar alimentos con los pastores cristianos que ahora no dejan de entrar y salir del inmueble de la calle Allende.

 

Los excesos de José Luis Garrido ya han empezado a hartar a varios de sus compañeros diputados que le dieron su voto para llegar a la oficina más importante del Poder Legislativo, por lo que algunos ya están analizando la posibilidad de proponer un cambio y concretar un relevo antes de tiempo tal y como en su momento le paso al soberbio morenista Víctor Manuel Báez López y a la petista Irma Garay Loredo, quienes fueron removidos de la presidencia de la Junta de Coordinación y Concertación Política antes de que finalizara su periodo.

 

Dicen que ese imberbe diputado lejos de concentrarse en los múltiples pendientes que tiene el Congreso del Estado anda más ocupado en presumir su numeroso séquito de lambiscones que tiene a su servicio y que son especialistas en vaciar las alacenas de la cocina y en llevar a cabo actividades triviales que no dejan ningún beneficio.

 

Garrido Cruz le juega al vivo y mientras por un lado dedica tiempo para coquetear políticamente con la superdelegada de los programas de bienestar Lorena Cuéllar Cisneros y aspirante a la candidatura de Morena al gobierno del estado y también lo hace con la alcaldesa capitalina Anabell Ávalos Zempoalteca que todos los días opera para convertirse en la aspirante del PRI para suceder en el cargo al actual mandatario estatal Marco Antonio Mena Rodríguez.

 

Ese diputado sueña con convertirse en candidato a la presidencia municipal y desde ahí, según él, seguir con su brillante carrera política, lo cual resulta una falacia porque es un personaje con mala fama, sin credibilidad y con acotada inteligencia.

 

Los días pasan y nadie hace nada al interior del Congreso del Estado para sacar los pendientes y realizar y concluir algunos procedimientos que se debieron concretar hace meses, como la designación del representante del Poder Legislativo ante el Consejo de la Judicatura del Poder Judicial que se encuentra suspendida desde febrero y el nombramiento de un integrante que hace falta en el Comité de Participación Ciudadana del inútil Sistema Anticorrupción del Estado de Tlaxcala que se debió realizar en agosto pasado.

 

Hoy en día los diputados locales están más interesados en ver su futuro político que en concentrarse en su trabajo legislativo, pues de los 12 miembros que conforman la bancada de Morena, por lo menos 6 tienen pensado buscar una presidencia municipal.

 

A esos legisladores hay que sumar otros siete más de diferentes partidos políticos que también están considerando ir tras el voto de los ciudadanos en los comicios de junio del próximo año, de ahí que no descarte que en unos meses más la mitad de los actuales diputados solicite licencia y los vea como candidatos a alcaldes.

 

Lo anterior explica muy bien las razones por las cuales se tienen múltiples pendientes en la actual y desprestigiada legislatura.