Un asunto que hasta ahora se maneja con total hermetismo y sin ninguna transparencia es el caso de los maestros que por no saber cómo funciona internet o las nuevas plataformas virtuales, por embarazo o porque llegaron a la edad de jubilación se han retirado del servicio activo, pero sin que nadie sepa quién está ocupando sus lugares o qué método utilizó la Secretaría de Educación  Pública para reemplazar a esos docentes.

La falta de claridad sobre cómo se concursaron más de dos mil 541 plazas a nivel nacional ha generado molestia entre los aspirantes a conseguir un empleo como maestros en la SEP, pues se estima que esos lugares se generaron entre abril y junio de este año, de ahí que las autoridades debieron llevar a cabo un proceso para encontrar a sus reemplazos y que éstos asumieran su trabajo en el recién iniciado ciclo escolar 2020-2021.

En Tlaxcala ha sido imposible conseguir el dato de cuántas plazas se abrieron y quiénes fueron los afortunados de conseguir ingresar a la nómina oficial de esa dependencia. A lo mucho en la entidad se han concursado entre 25 y 40 lugares para maestros para dar clases de Formación Cívica y Ética, Educación Especial,  Español,  Preescolar, Preescolar Indígena, Física, Química e Inglés.

Lo malo es que las dos listas de aspirantes a ocupar una vacante de maestro que se tienen (la de normalistas y la de licenciados de universidades públicas y privadas) sigue creciendo y no se sabe quién o quiénes han obtenido esos lugares, cuando en teoría los que tienen prioridad son los que están inscritos en el primer listado y si aún hay lugares se da entrada a los registrados en la siguiente relación.

El secretario de Educación Pública de Tlaxcala, Florentino Domínguez Ordoñez, llevaría a cabo un proceso  poco claro y amañado en la asignación de esas vacantes, según la queja que varios normalistas pretenden hacer llegar no sólo al gobernador del estado Marco Antonio Mena Rodríguez, sino al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a quienes le pedirán su intervención a fin de investigar el caso y evitar que exista favoritismo o corrupción.

Alguien debería explicar qué pasa en Tlaxcala con esas vacantes antes de que el problema crezca y genere protestas de los normalistas.

Diputados morenistas entregan el poder

Alguien debería decirle a los diputados de Morena que el poder se hizo para ejercerlo, porque nadie se explica cuáles fueron las razones y motivos para entregar a la chiquillada el control absoluto de la mesa directiva que conducirá los trabajos durante el primer periodo de sesiones correspondiente al tercer año de ejercicio legal.

La bancada de Morena que se la ha pasado en un absurdo pleito interno permitió que la intrascendente diputada de Movimiento Ciudadano María Isabel Casas Meneses asumiera la presidencia, acompañada de la conflictiva y poco productiva legisladora del PAN, Leticia Hernández Pérez que desde ahora podrá presumir que es vicepresidenta.

También lograron un lugar la Verdeecologista Maribel León Cruz y la representante de Nueva Alianza  Luz Guadalupe Mata Lara. El PT decidió enviar a la novata y limitada María Félix Pluma Flores y Morena a la gris y sometida Patricia Jaramillo García.

Si los diputados locales de Morena tienen meses peleándose los órganos de poder del Congreso del Estado, resulta incomprensible que en su estéril lucha cedan posiciones relevantes a la chiquillada y a diputadas que han sido determinantes para que uno u otro grupo pierda las votaciones importantes para sus intereses.

Los diputados de Morena podrían tener el control del Poder Legislativo, pero no cabe duda que el machismo y la actitud sobrada que tiene Víctor Manuel Báez López y la intolerancia combinada con su poca inteligencia que muestra Ana Bertha Mastranzo Corona los ha llevado a una disputa sin sentido, por lo que no sería raro que ambos legisladores sean marginados e ignorados por el resto de los integrantes de la bancada a fin de buscar la unidad que les permita ejercer su hegemonía.

Al final, los legisladores locales decidieron entregar un cargo importante a una insignificante e intrascendente diputada de Movimiento Ciudadana que sueña con seguir su carrera política y llegar a la presidencia municipal de Tepeyanco.

No encontraron mejor representante si su intención era decir a los ciudadanos y a las ciudadanas que la actual es una legislatura gris, sin resultados, ambiciosa, convenenciera, mañosa e improductiva que sólo ve por su beneficio económico.

Tlaxcala avanza al color amarillo del semáforo epidemiológico

Alguien debería explicar qué elementos se consideraron para que Tlaxcala  dejara el color naranja y pasara al amarillo en el semáforo epidemiológico que se estableció por la emergencia sanitaria provocada por la pandemia de Covid-19.

Más allá de que ese semáforo impuesto por el gobierno federal siempre ha sido inútil porque la entidad tiene semanas que disfruta de su nueva normalidad donde es evidente la relajación de las medidas sanitarias, en los hechos Tlaxcala sigue teniendo en estos momentos los mismos contagios y número de fallecidos que los registrados en junio.

Agosto reportó una leve disminución de casos con relación a julio, pero nadie puede negar que los infectados de este mes que está por concluir superan por mucho los registrados en abril y mayo, cuando las autoridades insistían en pedir a la población que se quedara en casa y determinaron el cierre de prácticamente todas las actividades no esenciales.

En abril no se tuvo ni cien casos por semana. En mayo los contagios aumentaron pero no hubo ninguna semana donde se alcanzara los 200 pacientes confirmados de coronavirus. En agosto se tuvo una semana que sumó 291 infectados, pero también registró una con 476 enfermos, de ahí que resulta ilógico que las autoridades sanitarias establezcan que la entidad podrá pasar a partir de este día al color amarrillo del semáforo epidemiológico.

Según ese color, en la entidad todas las actividades laborales estarán permitidas, cuidando a las personas con mayor riesgo de presentar un cuadro grave de Covid-19. El espacio público abierto se abre de forma regular, y los espacios públicos cerrados se pueden abrir con aforo reducido, lo cual es absurdo porque aunque lo nieguen Tlaxcala tiene varias semanas desarrollándose en las condiciones que supuestamente hoy se podrán permitir.