Hasta este día nadie está en posibilidades de asegurar que las tres asambleas distritales de Morena previstas para este domingo para elegir a sus 30 consejeros se realizarán legalmente y sin contratiempos, pues el gansteril comportamiento de los organizadores de las mismas hace pensar que no existen condiciones para garantizar la libre participación de los militantes de ese partido y sobre todo que ese proceso se apegará a la ley.

Una vez que el senador Joel Molina Ramírez dejó la dirigencia estatal de Morena, el partido no ha precisado quién es el responsable de las asambleas programadas en Tlaxcala en el Salón Azul ubicado frente Procuraduría General de Justicia del Estado, en Zacatelco en el inmueble conocido como Pista 3 Estrella localizado en la Avenida Lerdo de Tejada No 83 de la Segunda Sección y en el en el Centro de Convenciones de Apizaco que está en la Avenida Xicoténcatl en el centro de ese municipio.

Aunque Morena ha pretendido vender la idea de que es un partido político diferente, en los hechos recurre a las mismas mañas y vicios que existen en otras fuerzas para que un grupo determinado termine con el control absoluto del instituto, para lo cual no sólo manipula el padrón, las mesas receptoras de votos, el registro de participantes a las asambleas, sino que también dispone de las boletas que se usarán.

En la actualidad el grupo que tiene el control de las asambleas es el del ex gobernador y Director del Canal Once, José Antonio Álvarez Lima a través de sus personeros los senadores Joel Molina y Ana Lilia Rivera Rivera, quienes a su vez gozan del aval de Bertha Elena Luján Uranga que pretende convertirse en la próxima dirigente nacional del partido Morena que llevó a la presidencia de México a Andrés Manuel López Obrador.

Si las asambleas se realizan, de por un hecho que la dirigencia estatal de ese partido seguirá en poder del triunvirato conformado por Álvarez, Molina y Rivera, situación que seguramente alentará la polarización en Morena, donde no pasa desapercibido que existe una lucha interna por el partido y la designación de los futuros candidatos a los diferentes cargos de elección popular que estarán en juego en los comicios del 2021.

Pero también existe la posibilidad de que las tres asambleas se suspendan al no haber condiciones para llevarlas a cabo, debido a que hay un número importante de militantes tlaxcaltecas que no está conforme con la forma en que se pretenden realizar esos procedimientos, porque sencillamente no tendrán la opción de participar sólo por el hecho de no haberse registrado en el padrón del partido antes de noviembre del 2017.

El fantasma de la violencia y del conflicto ronda en Tlaxcala, tal y como también se hizo presente el pasado fin de semana en varias entidades del país donde Morena realizó asambleas. Esos actos partidistas se vieron manchados por comportamientos porriles de ciertos militantes que recurrieron a las armas y a otras artimañas para desacreditar la elección de consejeros.

La renovación de la dirigencia estatal y nacional de Morena no está resultando fácil. El desgaste del partido es evidente y de no ser porque el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, goza de una buena imagen y apoyo ciudadano, éste se mantiene en las preferencias electorales de los mexicanos, pero de seguir por el camino que va empezará a dar oxígeno a sus odiados rivales como el PAN o el PRI que lo necesitan para regresar a la escena política.

Veremos cómo sale el partido de López Obrador este fin de semana y que tan confrontados están los grupos internos que no sólo se disputarán la dirigencia estatal de Morena, sino la candidatura de ese partido a la gubernatura de Tlaxcala para las elecciones previstas para el primer domingo de junio del 2021.

Joel Molina y Ana Lilia Rivera están seguros que si gana la dirigencia del partido podrán disputar la candidatura al gobierno de estado a la actual “super delegada” y representante de la administración federal en Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, sin reparar que López Obrador tendrá sino la última palabra en la designación del abanderado de Morena, si una opinión que será determinante.

En fin, pronto sabremos en que termina el proceso interno de Morena.