A los sesenta le cayó el veinte de que una mujer debe tener fortuna, sobre todo si para merecerlo comprometió todo, hasta la progenie… pero ahora, nada más tiene su vivienda y… su auto… ¡pobrecita!

Hace como tres semanas –según narración de Perla López Loyo –, “un amigo al que quiero mucho y respeto, me dijo que no sirvo para la política porque soy una samaritana y solamente me preocupaba por quienes menos tenían y, para ayudarlos…”

Hay elementos para suponer que ese respetado y querido amigo de Perla, es el gobernador Héctor Ortiz Ortiz, quien hace más o menos esas tres semanas aludidas por López Loyo, la echaría de Tlaxcala, “porque lo de querer ser gobernadora se lo tomó en serio” –confiaría el mandatario a varios de sus confianzas. Entonces, la envió con su amigo Rafael Moreno Valle, el candidato de Compromiso por Puebla (PAN-PRD-Panal-Convergencia) al gobierno de ese estado, para ayudarlo a armar un sistema de aglutinamiento de mujeres, parecido a las redes que funcionan aquí (algo para mantener ocupada a Perlita, porque de abnegada colaboradora, capaz hasta de comprometer la vida misma y su progenie, pasó a una tremenda activista del despecho y reclamante de la escasa especie con la que en estos momentos cuenta, nada más su vivienda y su auto, se queja, en una entrevista al final de su adhesión a la causa marianista, donde utiliza su acostumbrado tiple un poco de niña boba, otro poco de ya ves?, con todo y mi ingenuidad y mi título académico de doctora, soy capaz de hacerte daño porque ya no me quieres <aquí  exaltaría el tonito ese como de Popis, el personaje encarnado por la grotesca Florinda Meza, en El Chavo.

La diputada de los folders vacíos y el interminable subir y bajar por los pasillos de San Lázaro, de súbito se dio cuenta que a los sesenta y tantos años, las mujeres deben tener fortuna, y no deben permitir que alguien las mande, y que prácticamente les dirija su vida… porque como es una mujer inteligente y responsable – así se describe en la mencionada entrevista – no está bien que nada más la tomen en cuenta cuando (su relativo intelecto) haga falta y se olviden de que es una mujer de carne y hueso que piensa y siente y sabe que puede… (aquí, para qué le voy a decir, si usted ya sabe que está escuchando a Popis).

(Ese grosero de Héctor) hace como tres semanas me dijo que yo no servía para lo política porque era una samaritana y solamente me preocupaba por quienes menos tenía y para ayudarlos… y yo creo que en la política tiene que haber del todo (sic)… nosotros, los samaritanos como (el malo, cruel y lépero de Héctor) me etiquetó, también necesitamos estar en la política porque nuestra gestión puede ayudar a quienes menos tienen.

Perlita, su inseparable escudero Luis Girón (quien salió del Partido Alianza Ciudadana, PAC, como tapón de sidra, cuando calzó los zapatos de la diputada y, sin tomar en cuenta su naturaleza de empleado, malito, malito, se aventó la puntada de “dejar a los militantes de su partido en libertad para que diesen su voto a quien mejor les pareciera”… bueno, hay que ser bien claros, Girón habló en esa oportunidad, un poco porque su jefe se lo ordenó <pues con eso acalambraron a Adriana y a su equipo de soberbios e ignorantes> pero el resto, no le costó trabajo alguno, porque así, como el pez que por la boca murió, tapó como el gato hace con sus heces, su falta de labor al frente del partido que si por él fuera estaría en serio riesgo de perder su registro) y el despecho, se combinaron  en una especie de tira cómica (Pinky y Cerebro) y comenzaron a planear la forma de regresar a Tlaxcala, porque oiga usted no era vida ir y venir con folders vacíos allá en los pasillos de la casa de campaña de rafamoreno, donde al parecer sí trabajan y, como una doctora con título de diputada ( o al revés) no está para esos esfuerzos (es más fácil espantar con el petate del muerto) entabló contacto con sus cuates integrantes de la bancada priísta en San Lázaro y tomó esta decisión de sumarse a Mariano (un hombre con experiencia, con trayectoria, con compromiso… no con fuerza… no rompiendo nada… sino al contrario… sumando <este es el discurso con el que la temblorosa Popis, también conocida como Perla López Loyo, entregó su virtud (ejem…) a Mariano.

A lo mejor, si Popis Loyo, escuchara la seguridad con la que su gran amigo, querido y respetado, augura ganar la elección para Adriana Dávila, dudaría con su natural capacidad de sentir miedo por cualquier cosa, en tomar la decisión que la colocó este domingo bajo los reflectores, eso sí, dignos de aplaudir de nuestros queridos camisas verdes, quienes gustosos levantaron su mano, igualito que ella lo hizo hace más o menos “tres semanas” a la mismísima Adri (claro esos eran tiempos de disciplina disfrazada de panismo).

Ahora bien, falta ver qué harán los otros dos diputados federales orticistas. Ya ve, Oralia López Hernández, fue la primera en hacer gestos un poco raros que el rostro muy de ella no los irradió así como que muy estéticos, pero al final de cuentas se disciplinó. Julián Velázquez (y conste que es amigo comprobado de Beatriz Paredes) también se sulfuró, al grado de mostrar su disgusto –temporal – por cualquier tema que le recordara a su compadrito. Nada más que con el paso de las semanas y la ya inocultable cucharota del presidente Calderón para que la sucesión saliera de acuerdo con sus indicaciones, pues no le quedó otra más que reencontrarse y hasta sentarse a la mesa a cenar, en aquella simpática ocasión en que una candidata invitada opinó de su conyugue, “pues se dedica a las labores del hogar”. Aplausos para semejante ejemplo de sacrificio, quien lleva siempre junto a él una bolsa en cuyo interior, sólo a los muy de confianza se les revela que van las históricas chanclas para que cada que se pueda descansen las adoloridas panteras sometidas a largos trechos de subir y bajar en esto que suele llamarse campaña política.