En los próximos días el asistencialismo de las administraciones federal y estatal estará más que presente en Tlaxcala, pues existe el objetivo de que ambas autoridades cumplan con sus metas y hagan realidad la entrega de apoyos económicos a los ciudadanos y ciudadanas que forman parte de algún programa gubernamental.

La inversión para alentar el desarrollo a través de infraestructura podría ser un tema pendiente para este 2019 por parte del gobierno federal que encabeza el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuya prioridad por el momento es concretar la dispersión de los apoyos económicos prometidos a los adultos mayores, a los jóvenes y a las personas con alguna discapacidad.

Las obras prometidas y ofrecidas hace unas semanas por López Obrador en materia carretera durante una visita oficial que realizó a Tlaxcala quizá puedan esperar junto con la inversión de casi 700 millones de pesos que se anunció en aquella ocasión, pues hasta el momento nadie sabe cuándo empezará el proceso de licitación y menos cuándo se podrían aplicar esos fondos que corren el riesgo de entrar a la bolsa de los subejercicios y perderse al no ser empleados para el fin que se programaron.

El objetivo prioritario del gobierno federal son los programas sociales con un alto grado de asistencialismo. Se dice que para el 1 de julio se tiene programado un informe de los avances logrados por la administración del presidente Andrés Manuel López, cuya meta es haber entregado para esa fecha apoyos económicos a 20 millones de mexicanos.

En Tlaxcala los funcionarios federales bajo el mando de la “super delegada” Lorena Cuéllar Cisneros trabajan a marchas forzadas para cumplir con la meta, es decir, beneficiar a casi 700 mil tlaxcaltecas, para lo cual en los próximos días ampliarán la capacidad de reparto de tarjetas a los beneficiarios de los diferentes programas para que a la brevedad reciban los recursos prometidos por el presidente de México.

Ojalá el gobierno federal no olvide la inversión en infraestructura y también establezca como prioridad esas acciones, porque si bien sus programas sociales tendrán un impacto en el desarrollo, lo cierto es que también este país y estado necesitan obras que contribuyan al progreso.

Pero el asistencialismo oficial que se vive en el país con gran intensidad no es privativo del gobierno federal, pues después de seis meses de que el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez anunciara el programa “Supérate” con el que se busca combatir la pobreza extrema en Tlaxcala, éste se hará realidad en las próximas semanas.

En breve iniciarán las acciones que permitirán atender en una primera etapa a 37 mil tlaxcaltecas que viven en esas condiciones, para lo cual el gobierno estatal también aplicará un censo para conocer sus problemas y necesidades, tal y como en su momento lo hicieron las autoridades federales para armar sus padrones respecto a sus programas sociales.

Según el mandatario estatal la estrategia del mencionado programa que se diseñó a partir de la experiencia de 20 países, incluyendo México, es contribuir al desarrollo de esos habitantes, porque el objetivo es hacer que Tlaxcala sea el estado con menor pobreza extrema a nivel nacional.

Para el programa “Supérate” la administración de Marco Mena tiene previsto ejercer para este año 200 millones de pesos que si se distribuyen equitativamente entre los 37 mil tlaxcaltecas que viven en 13 municipios de la entidad cada uno recibirá alrededor de 5,405 pesos.

Dicha cifra que es casi 35 por ciento mayor a lo que recibe en estos momentos un beneficiario del programa federal “Jóvenes Construyendo el Futuro” que cada mes le depositan 3,600 pesos para juntar al año 43,200 pesos, pareciera que es insuficiente para cumplir el objetivo de combatir la pobreza extrema.

El gobierno de Marco Mena podría saltar a la historia si en realidad comprueba que con la entrega de 5,405 pesos pudo logar que la mitad de los 74 mil tlaxcaltecas que viven en pobreza extrema dejaron esa condición en los próximos meses.

En lo personal creo que el programa “Supérate” es una medida asistencialista de las autoridades estatales que optaron por crear un acción gubernamental que les permita decir que ellos también entregan recursos a los pobres como lo hace la administración de López Obrador.

Dudo que 5,405 pesos sean un factor determinante para sacar de la pobreza extrema a 37 mil tlaxcaltecas como pretende hacer creer el gobierno de Marco Mena, sin embargo habrá que ver y conocer los detalles de dicho programa para poder evaluar su impacto en Tlaxcala.