La desesperación del sindicalismo oficial para evitar la pérdida del control de la Sección 55 del SNTE es enorme, como el miedo que tiene el aún dirigente de ese gremio, Ignacio Díaz Grande, para aclarar el destino de los gastos médicos y otras partidas que superan los 10 millones de pesos, de ahí que se hayan puesto en marcha una ilegal operación de compra de delegados que garantice la permanencia en el poder de ese nefasto grupo.

Como se lo advertimos hace unos días, la elección de la próxima dirigencia de la Sección 55 del SNTE será más que problemática, debido a que los docentes que integran el movimiento “Maestros por México” que representan los intereses de Elba Esther Gordillo Morales harán hasta lo imposible por recuperar el dominio en ese sindicato.

Ayer, un grupo de maestros jubilados tomó las instalaciones del sindicato y corrió a los representantes del CEN del SNTE que operaban a favor del grupo de Ignacio Díaz, por lo que no tuvieron otra que instalar su bunker en un restaurante ubicado por Tepehitec, donde siguieron operando la compra de votos de los delegados electos que participarán este día en el congreso sindical que se realizará en el Hotel City Express Apizaco.

Hasta anoche, Teresa Meneses Morales, quien es la responsable de las finanzas del sindicato se perfilaba como la “candidata oficial” para suceder a Ignacio Díaz, sin embargo su nominación generó una ruptura en el movimiento de Bases Magisteriales que comanda el convenenciero profesor Manuel Campos.

Por esa razón, el oficialismo del SNTE también empezó a manejar como una segunda opción el nombre de Saraí Zambrano, hijo de actual presidente municipal de Ixtacuixtla, Rafael Zambrano. Ese maestro estaría siendo impulsado por el torpe y gris Lenin Calva Pérez, titular de la Secretaría de Políticas Públicas y Participación Ciudadana y el carismático “profe” Florentino Domínguez Ordoñez, encargado del Sepuede e Icatlax, ambas dependencias del gobierno del estado.

Una tercera alternativa es la de Luis Carlos Rosete, un maestro que estuvo ligado a los intereses del grupo orticista y que hoy se encuentra vinculado a los dirigentes del SNTE que no quieren el retorno de Elba Esther Gordillo.

La cargada y las sucias maniobras de los actuales dueños del SNTE para impedir la libre participación de los maestros se hizo presente anoche, cuando se obstaculizó el registro de la maestra Mari Carmen Vera Almaguer, a quien se le impidió ingresar al mencionado hotel por instrucciones del insufrible Ignacio Díaz.

Vera Almaguer es una de las cartas fuertes de los “Maestros por México” para convertirse en la próxima secretaria general de la Sección 55 del SNTE, de ahí el absurdo y torpe comportamiento de Díaz Grande sólo provocó una mayor molestia entre los maestros que están inconformes con su periodo como líder sindical.

En unas horas más se verá si ganó la compra de delegados o los deseos de cambio. Por lo pronto le puedo adelantar que la elección del próximo comité ejecutivo de la Sección 55 del SNTE sacará chispas.

Una relación de respeto

Sólo dos diputados de los 25 que existen en el Congreso del Estado aprovecharon la presencia del gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez en la sesión solemne para pedirle su intervención en dos casos específicos.

La diputada del PT, Michelle Brito Vázquez, le solicitó que interviniera para agilizar la publicación de las reglas de operación que permitan ejercer más de 400 millones de pesos que se etiquetaron en el presupuesto de egresos de este año para financiar obras en los municipios y realizar acciones en el campo.

Ante tal planteamiento, el mandatario estatal reveló que será esta semana cuando se tengan esas reglas que por alguna extraña razón no se han dado a conocer.

También el legislador petista, Víctor Castro López, le pidió al gobernador su intervención para mejorar la atención a los enfermos renales de la entidad, por lo que le sugirió que hiciera buen uso de los recursos etiquetados para esa acción y evite gastos superfluos que no benefician a esos pacientes.

El mandatario aceptó de buen modo los comentarios y dijo que su administración dará un buen uso y destino a los recursos públicos, dejando entrever que puede existir una relación abierta y de respeto entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo.

Lo malo de la sesión solemne de ayer, fue la actitud de diva que tuvo la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, la morenista de ocasión Mayra Vázquez Velázquez, quien después de llegar tarde tuvo la descortesía de interrumpir la lectura de su compañera legisladora María Félix Pluma Flores con un afán tan protagónico que sus aires de grandeza le valieron múltiples críticas.

No cabe duda que el poder cambia a las personas.