Mientras diputados locales y autoridades estatales mantienen un pleito estéril e improductivo sobre las fallas que comenten a la hora de realizar su trabajo para evitar la discusión de temas relevantes e importantes, la delincuencia hace de las suyas y demuestra que está decidida a ganar presencia en Tlaxcala ante un bobo procurador que responde al nombre de José Antonio Aquiahuatl Sánchez, quien no puede con el paquete y ni tiene la voluntad de perseguir a los criminales.

 

Si los legisladores mostraran el mismo interés que tienen para acusar al mandatario Marco Antonio Mena Rodríguez de “gobernar por capricho” en temas relevantes como la inseguridad, quizá las autoridades estatales reaccionarían no sólo para justificarse, sino para emprender una serie de acciones que pudieran concluir con la detención de delincuentes que en hoy en día aprovechan cualquier oportunidad para retar al gobierno.

Nadie puede negar que los criminales han ganado terreno y que sus apariciones son más violentas, sin embargo el asunto pareciera ser menor y sin importancia para los diputados locales y los funcionarios de la actual administración. Para ellos es mejor sostener un pleito de vecindad y echarse la culpa sobre quién es el responsable de que ciertas reformas legales relacionadas al medio ambiente no se apliquen que en discutir aquellos asuntos y temas de importancia y urgencia que existen en el estado.

Como podría ser el enfrentamiento armando registrado en la población de San Miguel del Milagro, en el municipio de Nativitas, entre elementos de la Policía de Investigación de la PGJE y delincuentes que trataron de defender una bodega de autos y mercancía robada.

O que un comando armado robe a plena luz del día una gasolinera ubicada en el estacionamiento de Soriana Ocotlán en la capital del estado con tal impunidad que no tuvo problemas para evadir la justicia. En su huida, ese grupo criminal se llevó a dos despachadores que minutos más tarde los abandonó en la comunidad de Muñoztla en el municipio de Chiautempan.

Ni las 20 patrullas nuevas de la policía capitalina, ni las múltiples cámaras de videovigilancia y ni los 400 grupos de vecinos vigilantes pudieron ayudar a capturar a esos ladrones que lograron escapar y evidenciar que la policía capitalina con equipo o sin equipo sigue siendo ineficiente e incapaz.

Hasta ahora la diputada local del PT, Michelle Brito Vázquez, es la única que ha puesto interés en el tema de la inseguridad y en el pésimo trabajo que lleva a cabo el gris procurador José Antonio Aquiahuatl, quien ya demostró con hechos que ese puesto le quedó muy grande y que al final es un apantalla pendejos.

En Tlaxcala no se ve quién sea capaz de poner orden, porque la ausencia del poder es más que evidente, lo cual resulta preocupante porque al actual gobierno del estado aún le quedan 29 meses al frente de la administración.

Todos unidos contra AMLO

Un punto a favor del PAN en su abierta confrontación con el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador que cambió la operación del programa de las estancias infantiles, es que al menos ya logró sumar en su pleito al PRI con los alcaldes de Tlaxcala y Huamantla, Anabell Ávalos Zempoalteca y Jorge Sánchez Jasso, respectivamente.

Además de esos priistas que defenderán y respaldarán ese programa social, también se espera la participación en el “Foro Estancias Infantiles. Impacto en la Sociedad Tlaxcalteca” de las ex candidatas panistas perdedoras como Josefina Vázquez Mota y Adriana Dávila Fernández.

El evento se llevará a cabo mañana miércoles a las 9 horas en el Congreso del Estado. Las descalificaciones para la administración de López Obrador estarán a la orden del día y es muy probable que se aproveche la ocasión para desacreditar el trabajo de la “super delegada” Lorena Cuéllar Cisneros.

La sucesión en Tlaxcala está en marcha y por esa razón es probable que se valga todo.