Los priistas siguen buscando las razones que según ellos expliquen cuales fueron los motivos que provocaron ser borrados de la competencia electoral del pasado domingo, pues aunque sus rostros no ocultan la dolorosa derrota que sufrieron también revelan que están teniendo problemas para digerir el mega fracaso que tuvieron en las urnas.
Durante un desayuno que el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez sostuvo ayer con los presidentes municipales emanados de su partido, los candidatos del PRI que perdieron las elecciones federales y locales y el furioso líder del tricolor en Tlaxcala, Roberto Lima Morales, se dejó claro que los tiempos por venir serán difíciles porque la presidencia de México, el Congreso de la Unión y el Congreso del Estado serán controlados por Morena y sus aliados.
Sin hacer acusaciones concretas o directas, los abanderados priístas al Senado y a las diputaciones federales y locales avalaron los señalamientos emitidos en ese encuentro en el sentido de que hubo traiciones y simulaciones de muchos militantes del partidazo, situación que derivará en castigos y expulsiones que tarde o temprano se harán presentes.
A la reunión no asistió Enrique Padilla Sánchez, candidato del PRI a la diputación local por el séptimo distrito, quien quizá enfrentó la traición más grande porque siendo el abanderado en la demarcación más priista del estado se fue al tercer lugar en las votaciones al ser superado por el desgastado académico Serafín Ortiz Ortiz y el desconocido José Luis Garrido Cruz que llegará al Congreso del Estado luego de sumar más de 15 mil sufragios.
Anabel Alvarado Varela, candidato del PRI al Senado fue la que más consuelo recibió por parte del mandatario tlaxcalteca, quien también mostró su respaldo al torpe y sumiso Florentino Domínguez Ordoñez. Mariano González Aguirre, candidato a la diputación federal por el primer distrito estuvo serio, pensativo y distante.
Ante las muestras de apoyo y alivio que recibieron los aspirantes a la Cámara Alta del Congreso de la Unión, entre los asistentes al desayuno quedó la sensación que en breve Anabel Alvarado y Florentino Domínguez serán reincorporados al gabinete estatal y que la purga de funcionarios es inminente.
Durante el encuentro mañanero que por cierto disfruto al máximo la alcaldesa capitalina Anabell Ávalos Zempoalteca que se dedicó a comer e ignorar los mensajes, los presidentes municipales priistas fueron advertidos que deberán trabajar y hacer bien las cosas, porque si fallan o se complican la vida tendrán que enfrentar las consecuencias de sus decisiones.
En corto, los ediles lamentaron que los hayan citado a una reunión para regañarlos y advertirles de los tiempos difíciles por venir, cuando nadie los convocó para trabajar por los candidatos de su partido y que éstos no tuvieran la delicadeza de buscarlos e invitarlos a realizar campaña por ellos.
Pese a la terrible derrota que sufrieron, algunos priístas insisten en mantener al tope su estúpida soberbia como es el caso de Luis Miguel Álvarez Landa, coordinador estatal de la campaña presidencial de José Antonio Meade Kuribreña, quien ayer se presentó a las oficinas de la Oficialía Mayor de Gobierno para gritar que pronto regresará a su cargo como titular de esa área y que cuando eso suceda despedirá a todos los que dentro de la administración estatal traicionaron al partido.
La misma actitud soberbia se vio ayer en el Congreso del Estado, donde los suplentes de los diputados locales fueron maltratados, pues sólo se les permitió estar en funciones 90 minutos para después mandarlos a la banca porque los propietarios regresaron a sus cargos sin ninguna dificultad al tener como cómplice a la marioneta panista de nombre Juan Carlos Sánchez García alias “El Saga”, quien acató sin resistencia las órdenes de Mariano González Aguirre.
El Saga obstaculizó por casi un mes la llegada de los suplentes y se dedicó junto con su limitada inteligencia a cuidar los lugares de sus jefes en el Poder Legislativo.
Por esa razón quedó muy mal con sus otros patrones Alejandra Ramírez Ortiz, la frustrada perdedora y aspirante del PRD a la diputación federal por el segundo distrito y Serafín Ortiz, candidato a diputado local, quienes a cambio de darle trabajo en la UAT a la esposa del ex constructor consentido del orticismo Aurora Villeda Temoltzin, pensaron que Juan Carlos Sánchez les llevaría miles de votos, lo cual no sucedió porque el pegaazulejos es un farsante que se siente un gran político cuando en realidad es una piltrafa.
Mañana jueves el gobernador Marco Mena sostendrá una reunión con los miembros de su gabinete y después se espera que se hagan anuncios importantes, por lo que habrá que estar muy pendientes.