Los vientos de derrota han empezado a soplar en las endebles candidaturas de la coalición conformada por el PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y el PAC denominada “Por México al Frente”, pues al parecer se encuentran abandonadas por las dirigencias nacionales que visualizan que Tlaxcala está perdido y sin posibilidades de rescatar al menos una posición.
En política la forma es fondo y tal frase se puede aplicar a lo que vive en Tlaxcala la coalición “Por México al Frente” que no sólo enfrenta la dejadez de los militantes que integran esos partidos, sino la desidia de los liderazgos nacionales para tratar de levantar las campañas de los aspirantes al Senado y a las diputaciones federales y locales.
A esos candidatos y partidos se atribuyen las campañas negras que en los últimos han aparecido contra los aspirantes del PRI y sus aliados. La desesperación panista y perredista por haber perdido el segundo lugar en las encuestas los obligó a recurrir a la producción de videos para denunciar presuntos actos de corrupción y favoritismo del gobierno del estado hacia la priista Anabel Alvarado Varela.
También se les relaciona con las lonas que aparecieron en el municipio de Apizaco para recordar el accidente vial en el que estuvo involucrado el candidato a diputado local priista Emilio Sánchez Rivera, en donde dos jóvenes perdieron la vida y uno más resultó con una lesión permanente en un ojo.
Y no crea que la priista necesita de ayuda de la oposición para despertar el rechazo de los tlaxcaltecas, pues es evidente que algo tiene que su candidatura a la Cámara Alta no es del todo aceptada. Los ciudadanos no han tenido problemas para mostrar a otros abanderados de ese partido que andan en campaña su abierto desprecio hacia la ex secretaria de Gobierno y diputada federal con licencia.
La coalición “Por México al Frente” no pudo mantener las preferencias que logró a principios de este año. Si bien hubo cierto encanto con el paso los días éste se fue diluyendo y hoy no es tan fuerte como fue al principio.
Para nadie es un secreto que los panistas tlaxcaltecas bajo el mando de consumido Carlos Carreón Mejía dejaron de trabajar y operar desde hace algunas semanas por su candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés. La misma actitud fue asumida por la débil y en desgracia dirigencia estatal del PRD que mal preside Juan Manuel Cambrón Soria, quien ahora podrá atribuirse la aniquilación del sol azteca en la entidad.
Ante la fuerza y arrastre que tiene en Tlaxcala el candidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador, es difícil que Ricardo Anaya decida venir al estado a tratar de disputarle los votos de los ciudadanos y ciudadanas.
Por esa razón, no resulta extraño que el líder nacional del PAN, Damián Zepeda Vidales, haya dejado plantados a los candidatos de la coalición “Por México al Frente” que lo esperaban en el municipio de Zacatelco para encabezar un acto proselitista.
Las dirigencias nacionales del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano al parecer ya tiraron la toalla y esa situación resulta un mensaje negativo para los candidatos y sus seguidores, toda vez que aún faltan días para que terminen las campañas y no se puede dar por perdida la batalla.
En los últimos días de campaña habrá de todo, porque es una realidad que las coaliciones que participan en las elecciones mantienen viva la esperanza de resultar ganadoras.
Veremos qué pasa.