A la falta de coordianción entre los cuerpos policiacos que operan en la entidad, ahora hay que agregar la falta de un trabajo de inteligencia que ayude a combatir al crimen organizado que ya opera de una forma descarada, que incluso es capaz de cometer el mismo delito en el mismo lugar sin que haya un sólo detenido.

Hurtado 13

El modus operandi de de los delincuentes en el estado cada vez confirma que gozan de la protección de las autoridades encargadas de prevenir y combatir los delitos, porque actúan con total impunidad.

Aunque la Comisión Estatal de Seguridad Pública y los agentes investigadores de la Procuraduría General de Justuicia en el Estado lo niegan, en Tlaxcala las bandas organizadas para robar unidades del transporte público y camiones de carga tienen un marcado comportamiento que confirmaría que reciben cierta ayuda para cometer sus delitos sin el riesgo de ser detenidos.

Una parte básica de la inteligencia policiaca refiere que en cada robo hay un modus operandi que permite establecer líneas de investigación para determinar si se trató de un hecho aislado o un acto planeado, el número de delincuentes que intervino y las rutas, días y horarios en que se cometen los atracos.

Con esa infomación sería posible establecer ciertas estrategias que ayudarían a ubicar a los delincuentes y proceder en su contra, sin embargo en Tlaxcala eso no sucede y cualquier infomación que tienda a descubrir el modus operandi de los criminales es desechada por Hervé Hurtado Ruiz, el flamante Comisionado Estatal de Seguridad Pública que se siente el teniente Horatio Caine de la serie CSI Miami, porque simplemente no soporta que alguien le diga que su trabajo no conduce a nada.

Un claro ejemplo tiene que ver con la banda que opera en la entidad para robar unidades del transporte público, camionetas que nunca más son encontradas porque son desmanteladas para venderlas por piezas. En los últimos días van cuatro atracos de ese tipo que se registra en El Trébol, acción que se lleva a cabo los fines de semana y por la tarde noche.

Para cuando el conductor de la unidad puede avisar a la policía, ya pasaron varios minutos que son muy bien aprovechados por los ladrones para desaparecer sin dejar ningún rastro.

Algo similar ocurre con los asaltos a camiones de carga que por lo regular se cometen por diferentes carreteras de la entidad, pues aunque hay indicios claros de la forma en que operan esas bandas, hasta el momento nadie ha hecho algo para tratar de detener a esos criminales.

Sobre la venta de combustible robado, le puedo asegurar que hay más de tres alcaldes que han pasado reportes precisos de lugares y casas donse se comercializa esa gasolina, pero lo curioso es que esa información no ha servido para montar un operativo oficial que detenga a los responsables.

Y cuando la policía llega a detener a un delincuente, hay agentes del Ministerio Público que ponen cualquier pretexto para no recibir a esos probables responsables. Un claro ejemplo de lo anterior es Elodia Francisca Sotero, quien fuera protegida del ex subprocurador Víctor Pérez Dorantes.

Los agentes investigadores de la PGJE o policías municipales pueden avalar el anterior señalamiento, sin embargo esa Ministerio Público insiste en que será la próxima subjefa del Departamento de Investigación del delito región norte con sede en Apizaco, lo cual me parece grave porque está demostrado que es una mal funcionaria.

Van casi seis meses del nuevo gobierno y en materia de seguridad las autoridades nos han quedado a deber. O no.