En la marcha de ayer domingo, ausencias de abyectos como Cambrón y Sesín fueron suplidas por otros tipos del bajo mundo, como Cánovas y Herrera Murga

Victor Canovas, Daniel Herrera Murga, Lorena Cuellar PRD, Marco Antonio Mena, PRI, Tlaxcala Online, Caricatura

¿El saldo de la marcha de ayer domingo? Muchísimas consignas contra Marco Mena, maldiciones mil a losconsejeros del ITE, la intención de anular la elección comprobando el rebase del tope permitido, y dos sexagenarios con hinchazón de pies (bueno, de patas), mister Cánovas y mister Dany Herrera Murder, digoMurga (jejé).

La ex candidata perredista al gobierno, Lorena Cuéllar Cisneros, la emprendió también contra el señor manchis, por marrullero y mandón, y sin duda trae inquietos a los priístas que ya suponían la elección del cinco de junio como un asunto concluido… por ejemplo Ricardito García Portilla, a quien puede verse tirando rostro en San Lázaro, en lugar de andar aquí, atento a lo que se ofrezca porque, qué tal si el INE encuentra las cochinadas en la comprobación de gastos, en porcentaje suficiente para anular esto.

Lo que no comprendo son algunos términos usados por Lorena, como aquello de la segunda vuelta. Pues habría que hacer una nueva reforma para incluir esta posibilidad en las elecciones porque ahorita no la hay. Lo correcto sería una extraordinaria, pero para eso tienen que pasar varias cosas.

Entre el gentío, destacaban dos siniestros rostros: Cánovas y Herrera Murga. Dicen que tienen información importante, sobre todo el primero. Que no ha dejado de moverse con sus cuates y que anda muy seguro de echar abajo la elección.

Fue él quien contrató a la consultora llena de sujetos mañosos, casi gemelos de los traídos a la casa de enfrente por un tal Luis Carlos Ugalde, para hacer las cochinadas que tanto nos han dado fama, como si fuéramos una mala imitación de La Piedad, Michoacán, donde abundan las granjas de cerdos, cochinos, marranos o puercos, como ustedes quieran llamarlos.

Estamos a la espera de lo que diga el Tribunal Electoral del bueno, el malo y el feo. No hay que ser pitonisas para adelantar los resultados. Recordemos la opresión ahí donde más duele, sufrida por el magistrado Hugo Morales Alanís (el feo), hace unas semanas cuando visitaron su casa unos impunes pistoleros… sí, esos a los que la procuradora Alicia Fragoso Sánchez, dejó ir pese a la denuncia y a que fueron sorprendidos con chicas pistolotas en las manos.

Por muy machín que se quiera portar, el magistrado es feo, no tarugo, ni valiente, como para ponerse con sansón a las patadas. Es decir, la impugnación de los comicios no va a proceder. Y no tanto por la manchi presión, sino porque los lorenistas nunca pudieron aportar las pruebas de las mencionadas marranadas.

Así que su apuesta se va por el rebase de los topes de campaña. Sus consultores, conseguidos por Cánovas, aseguran que llegó a 83 por ciento. Supongamos que el INE encuentra la cuarta parte de lo reportado por el PRD; no le va a quedar otra que anular. De lo contrario se expone a recibir las más fuertes críticas por palero y miope.

Eso estamos por verlo.

Pero es necesario separar ambos casos. Uno, la impugnación de los resultados dependen de argumentos francamente débiles. Otro, el rebase de topes, ese puede prosperar.

Pero a los asesores de Lorena les conviene manejarlo todo en paquete. Si la elección llegara a caer, entonces llamarían defraudadores a los menistas. Y comenzaría la siguiente fase descalificatoria, ya como parte de una nueva campaña para conseguir votos.

Según Cuéllar Cisneros, Octubre será cuando la autoridad electoral convoque a nuevas elecciones.

Eso estaría por verse.

Lo que nadie puede negar es que, la llegada de Marco Mena –suponiendo que aguante vara hasta que rinda protesta- será en condiciones de legitimidad acotada. Sería un mandatario con una oposición creciente. Claro, ustedes me pueden alegar el acostumbrado cabildeo para doblar a los representantes populares, la mayoría de ellos acarician ese sueño para salir de pobres.

Eso, desgraciadamente significará comprometer gran parte de los presupuestos para sostener las mesadas de una turba de potenciales rastreros, y en consecuencia una corrupción peor que la vivida hoy entre sir manchis y su equipo de fieles mascotas, perredistas, panistas o de la chiquillada, pero con los colmillos afilados para irse a la yugular de quien ose dificultar los proyectos de su patrón.

Los graves costos ya saben ustedes, son una obra pública pésima pero cara y apartada para los cuates, cuentas torcidas pero aprobadas, clínicas de Salud sin medicamentos y sin equipos, ah, y huesos para el hijo y la esposa del compadre Héctor Maldonado… digo hay que asegurarles su futuro, por lo menos al muchacho ese que sin mucho mérito ya logró el sueño americano. Es un nuevo rico y poderoso al amparo de un padrino que ya huele a cadáver.

Un líder sin fuerza

Cada que el líder estatal del PRI, José Luis Ramírez Conde, aparece en escena me hace pensar en las vacas flacas de ese partido, tan dejado de la mano de dios que ha de recurrir a personajes como Güicho. Había de ser bueno ver en la defensa de Mena y su causa en riesgo por el asunto de los gastos, a Ritchie García Portilla, al delegado del CEN, o sea gente que nos dé la idea de un PRI que no es solo una leyenda.

Deveritas que ver a Ramírez Conde, da como tristeza mezclada con decepción.

Él tiene la culpa desde que empezó a vender las candidaturas. Si para eso hay que tener la gracia que Javier Michel, ese delegado… era una mula, pero generalmente se salía con la suya. Nada más le dio el negocio aRamírez Conde… y para abajo.

Ocoha Reza Videgaray

En la destrucción del PRI, por cierto contando con el concurso de chuchas cuereras como el senador Emilio Gamboa, hay que advertir la mano de Luis Videgaray, metida en el títere guiñol llamado Enrique Ochoa Reza, un inevitable líder nacional sin militancia –él lo dijo cuando hace poquito quería ser consejero electoral, y lo peor de todo, sin liderazgo.

Como en los buenos tiempos, los sectores ya hablaron y están tras Ochoa Reza.

Bajo la insensibilidad de los tecnócratas tricolores, un estado como Tlaxcala, vale madre a la hora de afianzar el apoyo, por ejemplo de un PRD, necesario para tenerlo de su lado en 2018.

Así que una elección como la de Tlaxcala, que convocó a más del sesenta por ciento del padrón, que tuvo un desarrollo intenso y hasta polarizado, acabará en la mesa de los políticos, bueno ni tan políticos porque estamos hablando de Videgaray, en tanto dueño de Ochoa, y empeñado en tatemar al principito de las mueblerías, Aurelio Nuño, miembro podrido al que hay que extirpar, con todo y su reforma educativa que no se negocia.

Si a Videgaray no se le hubiera ido el país de las manos, si la economía no estuviera postrada, si el petróleo no fuese un fracaso, reflejo de la reforma energética, pues habría de ser una buena apuesta del PRI.

Todo lo contrario. La fuerza que le da tener al presidente Peña de su lado, es una herramienta con el tiempo contado y con un desencanto social que ya veremos cómo nos va.