Cachan al más alto funcionario intentando cobrar diez veces más por la presentación de un grupo de medio cuño… rebotan su solicitud, cambia de grupo y encuentra financiero
La orden del presidente Peña Nieto es tajante. No habrá cena en Palacio Nacional. Primero como acto de austeridad presupuestal y luego, se ve de lo peor que mientras la raza lucha contra la lluvia y el frío en el zócalo, un arrogante desfile de encopetadas y entacuchados, se da la gran vida, como si las condiciones del país estuvieran para ello.
Pero aquí es Tlaxcala. Y el encargado de administrar el presupuesto para la Noche del Grito, es también el responsable de la política interna en el estado. Antes, entre francotiradores tomándonos como figuritas de feria, pambazos fríos y buñuelos aguatangados, el gasto era de más o menos 500 mil.
Lo más caro eran los grupos musicales, ya saben, arriba de varios escenarios a manera de circo de tres pistas.
Corre el rumor que el de mañana será un grito considerablemente más caro que otros.
El encargado de repartir la lana, le decía el señor naponeto habría acordado su presentación con Los Papis, un simpático grupo poblano de chavitos, cuyo gran éxito seguramente encanta al polémico secre (video https://youtu.be/RHboZRVyE4k ).
La verdad, el grupito está de moda. Una versión nos dice que su presentación se pactaría por 30 mil pesos. Pero qué creen, apareció un travieso cero y, la cifra subió a 300 mil pesos.
Alguien detectó la tranza y se la platicó al gobernador Mariano González Zarur, quien sacó la lupa, confirmó la tranza y simplemente la rechazó.
Hombre, qué vergüenza. A un funcionario de primer nivel lo cacharon en la movida y se la impidieron.
Ya saben, la información sigue fluyendo. Este es cable de último minuto. La tranza, digo, el negocio consistía en traer al grupo Blanco y Negro (unos chavos que luego se desafinan) y a los Papis (los del video, y a cada uno pagarle 300 mil varos.
Bueno, el descarado acto de corrupción se vino abajo, no así las ganas del señor chapis para celebrar doblemente el 15 de septiembre. Entonces contactó con la popular Mi Banda El Mexicano, esos sí bien famosos, aunque ya un poco rucos. El trato se cerraría por 170 mil pesos (esos sí cobran esa cantidad) aunque lo más probable –insisten- es que la cuenta de todos modos se cerró en 300 mil.
Como en el Ejecutivo estatal cerraron a naponeto la ventanilla, buscó y encontró quien pagara esa lana. ¿Saben donde? Allá cerquita, en las oficinas del Portal Grande, o sea en el Ayuntamiento.
Como quien dice el botín, digo, el resto de los 170 mil para pagar a Mi Banda El Mexicano, se va a dividir fifty-fifty entre este par de… funcionarios de los que no me siento para nada orgulloso.
Y si de sentir vergüenza se trata
No sé si recuerden ustedes el activismo que contra Mariano González Zarur, desplegó el delegado de Gobernación en Tlaxcala, Angel Isaac Ochoa Pérez, un tipo venido del Edomex con las ganas de hacer fortuna engañando gente. Le tiraba toda suerte de pedradas y, aseguraba que esa información –los excesos de junior, la corrupción y anexas- así de rapidito la enviaba al escritorio de su jefe Miguel Ángel Osorio Chong.
Ochoa Pérez solo solicitaba a periodistas, líderes, funcionarios y a quienes se dejaran: hablar bien de la administración de Enrique Peña Nieto, muy consciente y sabedor de las pésimas credenciales de Mariano, grande y chico.
Ese mismo Ángel Ochoa, hoy hace campaña por Marco Antonio Mena Rodríguez… “no se equivoquen, Marquito es el proyecto del jefe”, pues será su jefe, porque bien que le ha de procurar una mesada así de importante que hasta lo estimula para hacerla de promotor de una causa, sin importarle el papel de coordinador de delegados, ensalzado por él cada que puede.
En el Arlequín
No, pues el tal Ochoa qué va a informar a Miguelito Osorio Chong, sobre la reunión de ayer domingo en el salón Arlequín de Apizaco, donde lo menos que dijeron al señor Manchis es, muerto político… por cierto se lo dijo Luis González Pintor, su medio hermano ex senador panista y hoy inquieto miembro del autollamado grupo plural, mediante el cual juntaron arriba de mil personas en el salón este de Ángel Vergara, porque en el Emilio Sánchez Piedras, no hubo autorización.
Vaya si la presencia del perredista-marianista, Gelacio Montiel Fuentes y de otros finos compañeros de partido como el ex dirigente amarillo Cristóbal Luna, genera no nada más malestar, sino la seguridad de que llevan su mala estela adonde quiera que vayan.
Gelacio, aspirante al gobierno como por vigésima ocasión guarda resentimientos desde que nomás no pudo contra Maricarmen Ramírez. Y de ahí a la fecha al tipo se le ve en uno y otro bandos. Se ve que ya le agarró el modo a sacar provecho cada proceso electoral alzando la mano. Quien lo no lo conoce, lo puede comprar.