No hay dinero para ampliaciones presupuestales, siempre y cuando no se trate de poner a los burócratas a trabajar, por ejemplo, en la reforestación

Caricatura 1, Guillermo HJaro Belchez, Mariano Gonzalez Zarur, Se Raja Sembrar Arboles, Ciudad Judicial, Tlaxcala Online

Pero, ¿quién gana y, quién pierde con la falta esta de seriedad del ejecutivo tlaxcalteca, respecto a la no reforestación de 230 hectáreas de la Malintzin, equivalentes a 25 millones de pesos (mdp)?

Seguramente ganó el ex delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Jesús Romero Escobedo, quien la emprendió a su natal Morelos cuando sintió, las vencidas entre sus dos jefes, el procurador del Medio Ambiente, Guillermo Haro Bélchez y el gobernador, Mariano González Zarur.

Lo debe haber hecho porque, de todas formas fue pagada la multa de siete millones de pesos al gobierno de Tlaxcala por afectar los terrenos boscosos donde se edifican Ciudad Judicial (en el libramiento a Huamantla) y Ciudad de la Salud, en San Matías Tepetomatitlán. Pero él… no se fue con las manos vacías.

Información de Ana Laura Vázquez, del Periódico Reforma, describe cómo la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) informó a la Profepa sobre el pago de 7 mdp, los cuales habían sido conmutados luego que González Zarur, asumiera el compromiso de reforestar bosque gastando 25 mdp.

¿Cuánto vale la palabra de un mandatario que hoy se compromete a trabajar por el bosque de su estado y mañana cambia de opinión?

Debe ser muy poco

Porque no se trataba de cualquier inversión. La idea –señala Reforma- era sembrar 200 mil árboles con condiciones específicas en 230 hectáreas de parajes de Huamantla y Teolocholco, además de construir 10 presas de gaviones para retener agua y recargar los mantos acuíferos, apunta.

Se trataba de una de las escasas acciones positivas para enmendar la prepotencia de la Secoduvi, desmontando bosque, por cierto en predios anexos a una propiedad del ejecutivo, según lo documentó el mismo rotativo.

Así que al venir el procurador VIP a Tlaxcala… a Teolocholco para ser precisos, y en esa gira expresar: «El Gobierno (de Tlaxcala) se ha allanado a los procedimientos y hemos encontrado la fórmula para conmutar el pago de estas multas a favor del medio ambiente», ignoraba que su contraparte… como dice una cosa, dice otra.

Tal vez no esperaba un: “me rajo”, cuando al susodicho le cayó el veinte respecto al trabajazo en puerta.

Les apuesto que su asesor estrella en materia de negocios de la construcción… un tal Roberto, debe haberle dicho… amo, la estás regando, nos van a auditar cada uno de los 200 mil árboles y las demás obras… y a estas alturas en que ya no podemos con tantos negocios, ¿quién piensa en ir a ensuciarse las botas y hasta correr el riesgo que los talamontes se burlen de nosotros?

Práctico como es, debe haber respondido… condenado Romano, esta vez tienes razón. Dio la orden y el billete se depositó.

Haro Belches, seguro se quedó perplejo

Y diría a su interior: no vuelvo a hacer tratos con este canijo tahúr.

Y así concluye el intento de reforestación más importante en el año de la consolidación.

El ranking de delegados

Ojalá estén de acuerdo en que es la Profepa la delegación con menos credibilidad. No nada más se humilló con el asunto de la reforestación frustrada. También alentó un dramático uso de suelo en la región limítrofe de Zacatelco y Natívitas; en la ex hacienda de Santa Águeda para ser precisos, donde Tlaxcala pasó de cuidadosa entidad de sus extensiones rurales, al paraíso de la especulación, por cierto de mañosos capitales sin otra intención más que multiplicar sus inversiones.

Primera semana de junio, Ángel Isaac Ochoa Pérez, asumía por mandato osorista (o chonguista, como gusten) la coordinación de los esfuerzos de las delegaciones federales (¿?); se trataba de mejorar la imagen, yo diría la descuidada imagen del presidente Enrique Peña Nieto.

Poco más de cuatro meses después de los cuarenta y cuatro delegados, podría salvarse el convenenciero de Sedatu, el cuñao despeinao de Infonavit, la obsesiva de Sedesol y la solitaria mujer del Centro SCT.

Conste que por sus manos pasan más de dos mil millones de pesos.

Es que hay casos patéticos, como el de Perlita y sus largas ausencias del ISSSTE, o el del muchacho este que firma los pasaportes y se pone como león cuando toma copitas, reclamando a todos por qué su apá no llegó a la gubernatura.

Cuatro meses después, reitero, la imagen del Presidente… pues peor que antes.

No todo es culpa de esa mayoría de delegados. Los trágicos sucesos de Iguala, Guerrero; el viaje al club de los ricos cuando el país se desmoronaba y lo peor: la casa de siete millones de dólares que Televisa dio a la Primera Dama por haber sido una primerísima actriz.

Creo que la mejor pagada era Talía y nunca le dieron más de un millón de dólares. Ya ve, lo que dice la señora de Peña ha sido blanco de tremendas críticas. Mejor habría sido no salir al escenario.

Ante esa monstruosa cascada de maldiciones qué pueden hacer los inocentes delegados de Tlaxcala. Por lo menos trabajar. Mire que es ofensivo ver una Profeco tan permisiva con la Feria de Tlaxcala, a la PGR nadando de muertito y al INAH, haciéndose desentendida de la compra-venta de la legendaria ex hacienda de Santa Águeda, para hacerla un fraccionamiento.

En este sexenio, todos jalan agua para su molino… porque Peña lo permite.

Encañonada

Iba la senadora Martha Palafox Gutiérrez en su Ram de doble cabina al informe de Totolac, cuando unos agentes ministeriales la detuvieron y, sin medir consecuencia la encañonaron. ¿Motivos?, su troca llamaba demasiado la atención.

Algo omitieron los tiras aquellos. Para que una troca compruebe ser del crimen organizado: 1.- Debe ir el radio a todo volumen con música de la Arrolladora; 2.- Las placas de circulación, de Sinaloa, Shihuahua o Tamaulipas. 3.- Que el conductor porte chicas cadenotas y unos Ray-Van todos chimecos.

Nada de eso ocurría con la Ram de la seño Martuchis, y de no ser por las carotas del ex general encargado de su seguridad, a los ministeriales esos ya los veo pidiendo a la legisladora para las aguas.

Así funcionan.