Rubén Darío y su flotilla de chatarra… * Dos procesos administrativos a los estados financieros entregados por Orlando Santacruz… ** ¡Junior ya tiene novia!, ¿se nos casa?
El antecedente del transportista encargado de llevar y traer a los profesores a los planteles donde imparten clases debería tener menos tizne, como el que se filtra en las desvencijadas unidades que huelen a río y brincan como chivos.
Al señor Rubén Darío Domínguez, le ha convenido bastante sacar del cementerio sus unidades desahuciadas, y llenarlas de maestros.
Yo no sé si los invitados al bodorrio, allá por Tepoztlán Morelos, habrían aceptado ser llevados en estos, que alguna vez fueron transportes decentes… como quien dice, para ese tipo de eventos hay suficiencia. No para el cumplimiento cabal de un compromiso signado en acuerdos formales (nunca mencionaron lo mañosa de una de las partes).
No es lo mismo llevar mentores en su estado, que hacer negocio con indocumentados.
Tampoco lo es hacer efectivo un punto de la minuta entre gobierno y magisterio, pensando en que se trata de un acto de acarreo para alguna travesura política en Zacatelco.
No. Esto es un servicio dentro de un contexto de absoluta seriedad.
Ya vemos que el cumplimiento, a medias, es parte de una política a la cual no le cuadra el significado de la palabra dignidad.
Aparece el peine
Dos procedimientos administrativos son lo que el gobierno municipal de Jorge Luis Vázquez Rodríguez ha iniciado contra el ex alcalde de Apizaco, Orlando Santacruz Carreño, por instrucción de la Secretaría de la Función Pública.
El ex munícipe presume que en Tlaxcala ganó el estado de derecho con la aprobación de la cuenta pública del año pasado, lo cierto es que el ex consejero jurídico del sexenio anterior requerirá de mucha suerte para evitar la sanción.
Nos dicen nuestras fuentes que la Función Pública determinó que el ayuntamiento de Apizaco debe reintegrar más de 20 millones de pesos correspondientes al Subsemun y que hasta la fecha nadie sabe en qué se gastaron, pues la comprobación de esos recursos simplemente no se encuentra por ninguna parte.
A ese procedimiento, hay que sumar otro por el Fondo de Infraestructura Social Municipal por el orden de los 15 millones de pesos, añaden nuestros informantes.
Datos de los que disponemos señalan que las obras que se debieron terminar en el 2013 tienen un avance del 38%, cuando en realidad algunas apenas si tienen un trabajo de 20% como es el caso de los trabajos realizados en Cerrito de Guadalupe y Texcalac.
Sin embargo, lo que llama la atención es que esas obras fueron pagadas al 100% por la administración honesta de Orlando Santacruz.
Cuando uno observa las múltiples irregularidades en la administración del ex alcalde panista, no se explica cómo los diputados aprobaron la cuenta pública, o mejor dicho, si lo entiende cuando uno se entera del manejo poco claro que existe en Tlaxcala de los recursos destinados a la seguridad pública.
Como se recordará Orlando Santacruz fue designado representante de los alcaldes de Tlaxcala en el Consejo Estatal de Seguridad Pública, organismo que recibe millonarios recursos con la condición de entregar el 20% a los municipios.
Cuentan que en 2012, Tlaxcala recibió los fondos y repartió 68 millones de pesos a los ayuntamientos, reparto que terminó en la compra de 60 autos Tiida de la marca Nissan. Orlando firmaría y consideraría ejecutada dicha suma.
Dicen que un año después el manejo de esos recursos fue similar y que el ex alcalde panista daría su aval al manejo poco claro de ese fondo.
Por esa razón, crece el rumor en el sentido que el PRI y el gobernador Mariano González Zarur, estaban más que interesado en aprobar la cuenta pública del 2013.
Sin embargo, nadie pensó en el gobierno federal que ya anda tras la pista del manejo poco claro de los recursos en materia de seguridad no sólo en Apizaco, sino en la administración estatal.
Vengan los cortes
¿Cuál es el sitio de moda en la Feria?
Claro, La Cabaña. Primero por los precios… hay que ser rico para saciar allí el hambre y luego porque, la élite del poder ha tomado este sitio como centro obligado de reunión.
La mesa, llena de viandas y cervecita y wisky. La alegría, insuperable. ¿de quién se trataba?, pues de Pedrito Pérez Lira, celebrando la aprobación de su cuenta pública, con todo y asta bandera monumental encabezando una serie de obras dudosas, y el desatino de subestimar a los ciudadanos de la capital de Tlaxcala.
Dios los hace y ellos…
El novillero gordito de Tlaxcala anda loco de contento, presumiendo al forro de mujer que, ¿dónde creen ustedes que trabaja?… pues en Televisa hombre… ¿dónde más?
Se trata de una de las güeritas más cotizadas de la telenovela y la conducción, Ingrid Martz.
Eso huele a boda… pero no en Tepoztlán (ahí hace demasiado calor), se me hace que esa unión viene a lo grande… hombre, para eso sí hay recurso….