No todos están obligados; burócratas de pedigrí, asesores externos, diputados y parentela, viven la temporada sin sobresalto alguno, como no ocurre con el pueblo.

Caricatura 1, Arturo Tecuatl, Apretar Cinturon, Pobreza, Corrupcion, Gabinete, Pueblo, Mariano Gonzalez, Tlaxcala Online

Al gasto austero que promete Mariano hay que sustraer los viajes al extranjero –que son inevitables- y el abultado pago a asesores externos, hoy más que nunca a causa de tantos frentes abiertos.

¿Qué nos queda?

Seguir cuesta abajo.

“Nos tenemos que apretar el cinturón nuevamente, se están terminando de ver las cosas pero los pronósticos de ingreso no son nada halagadores, por lo tanto tenemos que ser conscientes de eso, no podemos preparar un proyecto que después no se pueda llevar a la práctica”.

Pero, ¿todos nos apretamos el cinturón?

1.- A la gente no le queda más remedio que seguir con los números alegres de la propaganda oficial. Abrigamos la esperanza que la luz va a bajar, y la gasolina, y los impuestos. Que los ingresos van a subir ahora que ya tenemos socios que preparan sus popotes para dejarnos sin petróleo. Ahora que se pueda… nos reparten los útiles escolares, porque verán ustedes, la tardanza es cuestión de enfoques, según el más añoso de los secretarios, o sea Tomás Munive.

2.- A los servidores públicos de los niveles más bajos les toca correr el cinto dos agujeritos más, y hacer magia con las miserias recibidas a la quincena… policías, secres y gente de limpieza, todos ellos la tienen sentenciada con el 1.6 por ciento de incremento presupuestal, según el conformista proceder de un mandatario al cual parece urgirle pasar ya a la historia… ¿como el mejor? (yo creo que no).

3.- En cambio, a los subordinados con pedigrí es cuando mejor les va… bueno a ellos siempre les va bien, pues a los ahorros en los costos de productos adquiridos y obras realizadas, lo único que no baja son las comisiones. Al contrario, como ya se acerca el año de hidalgo, todos los que tienen la posibilidad de engordar sus chequeras o hacer bodeguita en el rancho, ni siquiera lo dudan. ¿Pruebas?… el cinismo de Tomás Munive, quien al día de hoy no podrá negar haberse embolsado 22 millones de pesos, que debieron gastarse en útiles escolares.

4.- Tampoco sufren los diputados del hato en engorda. ¿Cómo le pueden hacer?… pues vendiendo caro su voto, para lo cual han de poner cara de indignados cuando les llega la orden de enfrente para sacar tal o cual dictamen de cuenta pública, ley o lo que se trate. Además, entre la dieta mensual y los ingresos normales, los señores y señoras representantes populares no nada más tienen para hacer eco a la propuesta de economía austera, del gober… para nada, debe alcanzarles para sacarse fotos donde aparezcan lindos, de tal forma que a su carrera política den la solvencia necesaria. Si a alguien no le cuadra este comportamiento, pues a fregadazos lo hacen entender, al fin que para eso tienen bola de guaruras con traje brilloso, bota picuda y pelos como integrante de la arrolladora banda el limón.

5.- Pero los más favorecidos con esta política de austeridad son los asesores externos, con cuatro años de animar al mejor cliente de su existencia para iniciar mil pleitos, tirando lana que da gusto, aunque después sufra derrotas en cadena… “ni modo, no se pudo” dicen a ese cliente que les platico, quien ordena y ordena, pero pocos lo obedecen (ha de ser porque ya le ven cerquita el final).

Obsesiones

Ahora resulta que sus antecesores lograron los mejores presupuestos para el estado. Chance y por eso, a Héctor Ortiz no halla cómo mandarlo al paredón. Y a su primo Sánchez Anaya, no para de criticarlo por haber gastado tanto en los llamados grupos sociales.

Y luego, nadie encuentra explicación a las tragedias electorales. Helo, con todo y rodilla así de hinchada (y dicen que la cartera bien flaca), Alfonso va en caballo de hacienda (ha de ser de mulas, como la suya, de Toltecapa) en el mismo distrito donde mini-manchis ha jurado por esta, “voy a ser candidato y voy a ganar”… ojalá no se lleve una decepción.

Felicidades a los diputados

Porque lograron superar la peligrosa temporada septembrina, cuando sus organismos prácticamente estallan de tantas comidas, cenas, wiskis y tequilas, con motivo de las Fiestas Patrias y sus presentaciones simultáneas donde según sus asesores, la gente los idolatra (ajá).

Pero, ¿cuándo se ponen a trabajar?

No se crean… los diputados también chambean. Bueno. Cuántas sesiones tienen que realizar antes que concluya el período ordinario para poder sacar las más de cien cuentas públicas rezagadas a causa de las contras que la comisión de fiscalización le juega al Órgano de Fiscalización Superior (OFS).

No, pues les aguardan sesiones maratónicas.

Y luego, con la cruda como de tres semanas juntas por los excesos de la temporada, quién sabe cómo nos vaya…