Dicen que tiene los arrestos para mezclarse entre las multitudes y activar los códigos tlaxcaltecas al más puro estilo de Tulio Hernández, para encontrar verdaderas soluciones.
El ritmo vertiginoso del desempeño tlaxcalteca dio así de rápido algunos encargos al recién desempacado secretario de Gobierno, Ernesto Ordóñez Carrera.
Acuamanala y lo que se torna como el chantaje postelectoral, obliga al cambio de estrategias y personal en la Segob. Le juro que un Joaquín Flores Nophal, y su pesado existir ya no debería considerarse en lo que se espera un arcoíris de soluciones y no el ocaso –que nada arreglaga- del equipo de Miguel Moctezuma Domínguez, merecidamente retirado del activo.
Y como Ricardo García Portilla, ya no está en Finanzas, este es otro escenario. Nada parecido a aquél esquema canibalístico donde el trío infernal hizo trizas a los tres primeros titulares de la Segob.
¿Veremos al responsable de la política interna asumiendo completo el aparato de inteligencia del gobierno? O, ¿persistirá esa dualidad mariana tan perjudicial para su misma causa… sospechosista de uno y otro lados. En constante y desesperada búsqueda de asesorías externas, caras, ineficientes e improductivas.
Y pensar que Mariano siempre tuvo junto a él la solución. Acaso era tan simple que no se animaba por ese miedo a quitar lo sencillo a las cosas.
Pero nunca podrá olvidarse la forma mariana de jetatura hostil y ofensa constante, mientras las verdaderas decisiones eran tomadas por los mercenarios o por el irreponsable retoño, hoy por hoy, responsable del fracaso paterno.
Una versión más de mayordomo entra al escenario. Sabe hacer las cosas… tiene su temperamento, pero más la conciencia que este es su último tren.
Ahora depende de su habilidad para seducir a Jorgito Valdez, el manos de oro con la pluma para firmar los cheques en la oficina de la cual fue afablemente desalojado el calpulalpense García Portilla.
Todo se paga en esta vida. Y ahora, sus deseos de vincular al partido con este singular gobierno –de convicciones muy de él respecto a temas como el compromiso social, al que confunde con sentido de pertenencia- también dependerá de sus buenos oficios de gestor para poder cumplirle a una militancia tricolor vejada sistemáticamente.
No es lo mismo firmar cheques que mendigarlos.
Con razón cualquiera, hasta el asesor michoacano Mario Armando Mendoza Guzmán, podía meter su cuchara en las altas decisiones. Desconocedor absoluto del entorno, sin embargo tuvo en sus manos todo el poder para hacer y deshacer.
Deshizo por ejemplo a Joaquín Cisneros Fernández. Siempre le habló con el desdén que da la ignorancia. Y será coincidencia, quién sabe, pero a Joaquín hoy lo veremos despachando en una delegación de lujo: Relaciones Exteriores. Eso quiere decir que las aguas regresan a su nivel.
Y aunque el purépecha se afianza a Tlaxcala, el grupo del cual se valió para atropellar a personajes con toda una carrera en la política local, todo se derrumbó cuando la estrella del trust dejó Finanzas.
Dicen que el estilo de Ordóñez le permite hasta confundirse con la multitud. Será su complexión más bien baja y la agilidad que le dan sus cincuenta años de edad lo que le dota del código tlaxcalteca-tricolor, al estilo Tulio Hernández Gómez: dialogar, buscar soluciones, beber pulque, no regatear el tiempo, y hasta mostrar el lado débil cuando el exceso de néctar ha saturado la víscera.
Otro de los retos en los que se movió como pez en el agua fue la presencia de los gobernadores de esta región centro, para evaluar las acciones de seguridad. Encabezadas por el titular de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, las autoridades de esta porción del país dieron cuenta de la contención del efecto cucaracha y de la persecución del delito, sin tregua y sin horario.
Y por primera vez se vio a Mariano sin el sobresalto que le causaba la lentiltud de Miguelito Moctezuma, un político muy digno pero de otra época. Hoy los protagonistas deben ser jóvenes, pero no irreponsables como el retoño, y ágiles para que no se les vaya el tren.
Veremos a Ordóñez, operando Acuamanala. Veremos qué tan capaz es de combatir con eficiencia el coco del gobernador: las movilizaciones. Lo veremos como un personaje que surgió de repente, sin haber estado ausente, por encima de los prestigiosos nombres como el de Ubaldo Velasco, Teodardo Muñoz o Silvestre Velázquez.
Corrupción en el ISSSTE
De varios años a la fecha, la Auditoría Superior de la Federación halló casos escandalosos, por ejemplo en la conducción de su delegación en Tlaxcala. Espanta saber que hay un ex represente legal de esa institución que durante años cobró las pensiones de personas que ya habían dejado de existir.
Viene fuerte la mano correctiva de la ASF.
Que quebró el concierto de Sasha
Y las víctimas fueron los socorristas de la Cruz Roja Mexicana, a quienes debió darse cinco por ciento de las ganancias del espectáculo.
La señora Martha Sesín, tiene que dar una explicación respecto al pésimo negocio ese de traer a cartuchos quemados del pseudo pop mexicano (los ex timbiriches estos) porque eso sí, a la gente de la institución la ocupó lo mismo para vender boletos que para acomodar sillas y claro, para resguardar con unidades cualquier eventualidad en el masivo.
Pues qué chueca la seño.