Parece que el favor no pedido conocido como el plan González, va a arrojar terribles costos políticos que involucran instancias superiores.

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La falta de armonía entre las decisiones tomadas en la oficina del gobernador Mariano González Zarur y otras, tal vez con mayor planeación y con un rumbo más definido y tienen sus consecuencias.

1.- Cuando Rafael Ortega levantó la mano para participar en el proceso interno del tricolor, Mariano le envió el más desdeñoso mensaje: “zapatero a tus zapatos”. Era claro que González tenía otros planes para su querido Apizaco, y veía muy remoto que Rafa, todo un caso de la cultura de la superación, pero falto de casta, pudiese aspirar a semejante cargo. No tenía, ni iba a tener el beneplácito del hacendado.

2.- Entonces el matador tocó otras puertas. Seguramente recordó la excelente relación con el ex gobernador de Hidalgo y hoy, ni más ni menos que secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Al ver la actitud marianista de exclusión, seguramente lo platicó con su buen amigo el hidalguense y, juntos urdieron un plan que, creo llegó hasta el cierre de las casillas, el siete de julio.

3.- El equipo mariano habría metido las manos por todos lados, aun donde no lo llamaron. En 43 municipios de plano tronaron;  pero les interesaban los distritos… así es que a como dio lugar, se hicieron con 12 de ellos, en medio de críticas e impugnaciones.

Trato de entender que la alianza con Osorio Chong no fue ganadora de la elección. Poco más de 140 votos marcaron la diferencia, pero el proceso constitucional transcurría sin sobresaltos –salvo el terrible bodrio llamado SARJE.

En ese momento se activaría el plan González. Y el equipo completo –creo que sin que se los pidieran- se transformó en el team de Misión Imposible. Y tras haber perdido cuanto pudieron, se concentraron en Apizaco… la cosa era quedar bien con la superioridad.

Madrugada del ocho de julio. Un aparatoso convoy llegaría a las instalaciones del Consejo Municipal del Instituto Electoral de Tlaxcala en Apizaco. Era la procuradora Alicia Fragoso Sánchez, narra una serie de crónicas locales y nacionales.

Lo que pocos sabían es que al frente de los municipales resguardando los paquetes estaría Orlando Santacruz. –Nos los llevamos… -No se los llevan… en fin, visitante y anfitrión llegaron a tal nivel de enfrentamiento que, nos dicen testigos, ministeriales y municipales se apuntarían con sus armas. Eso estaba a punto de convertirse en un infierno.

Una llamada telefónica irrumpió. Licha daría el teléfono a Orlando. Del otro lado, la voz más lépera de Tlaxcala… inventando majadería nuevas y soltándolas todas de sopetón a quien sostenía el aparato junto a su oreja.

No lo escuchó. Eran momentos importantes. Se realizaba la defensa de los votos. Pero esa particular voz aplicaría el monopolio de la violencia (del Estado, claro) para imponerse.
Alguien recuerda una de las últimas frases: “… si no sabes de política, para qué te metes”.

Horas después se dio el terrible viaje de las Mercedes Benz (no eran subúrbanes). El plan González se había activado. De entonces a la fecha, las instancias bajo la batuta mariana sabían qué tenían que hacer.

Solo así me puedo explicar por qué Rafa no recibió personalmente la constancia de mayoría.

1.- Esas instancias locales arrebataron, pero su fortaleza es relativa.

2.- Siete votos es una diferencia tambaleante.

3.- El hilo se romperá por lo más delgado: los consejeros municipales, quienes  ya enfrentan denuncias penales en su contra. Ellos carecen de fuero constitucional.

Los que regresan a la chamba

Tras las elecciones, llama la atención que, aquella advertencia del gobernador, de no recontratar a quienes solicitaron licencia, se la llevó el río.

Regresa Aldo Lima al Instituto de Desarrollo de la Vivienda de Tlaxcala. Encabezó una poco exitosa comisión priísta con miras legales para asesorar candidatos.

Regresa el doctor Jorge Luis Vázquez Soto, a una secretaría de Salud que en su ausencia prácticamente estuvo paralizada.

Y el regreso que inevitablemente se va a dar, pues es el del subsecretario técnico, Mario Armando Mendoza Guzmán, tras el papelón hecho en el proceso electoral.