Pues qué esperábamos si votamos por un jugador para ocupar el timón del estado. Es de los que nunca pierden, nada más que tiene que haber alguien sacrificado.

Casi no se nota eh… la mala leche con la cual juega aquél que debería cuidar los intereses de Tlaxcala.

Se supone que los servidores públicos de más alto nivel, se someten cada día a extenuantes mesas, donde cada cual aporta lo que está a su alcance para hacer floreciente al estado que les paga.

Mas nos hallamos ante una retahíla de tahúres, haciendo movimientos, temerarios y lesivos, con la rapaz creencia cortoplacista de atiborrar sus cuentas personales, pero en un contexto histriónico de lamentación creciente… ah de nosotros, qué pobres somos… por eso hemos de dejar a más sin trabajo, y así podamos ahorrar esos centavos para pagar los platos rotos que… no lo diga tan alto, pero son mi responsabilidad…

Entre la vocación de servicio y este saqueo que vivimos hay un trecho que se llama manchicultura.

Si aquellos derivados de dicha seudo doctrina tienen algo en sus manos para herir al estado… no lo dudan. Lo hacen. ¿Quién es el perjudicado?. ¿Quién se atrasa?, ¿Quién incrementa resentimientos?

Sí, este pueblo maltrecho, desempleado y con escasa esperanza del necesario relevo en el timón. Porque, le diré… en ese puesto, hace falta un hombre. Y no nos limitamos al ámbito de género, sino al amplio concepto de líder en un contexto de moral y de fortaleza para dejar sembrada la semilla que motive a un pueblo a considerarlo como el mejor gobernador de la historia moderna… bueno esa era la intención. Pero, ya ve usted, el tiempo se encargó de descubrir el verdadero gesto del tahúr.

¿No cree usted que la culpa es nuestra? Votamos por un jugador. Hoy vivimos las consecuencias.

Un tipo con esas características procurará siempre ganar. A costa de los demás. De los matadores de toros, de los empresarios nóveles, de las autoridades ingenuas y de un pueblo confiado que algo vio en su mirada de soledad y desesperanza para otorgarle un voto de lástima (aunque la versión oficial sostiene una especie de voto en cantidades brutales a causa del encanto varonil con interesantes sienes blancas).

El reclamo de Emilio (Gamboa), la mayor parte del cual comentamos ayer con usted, abarcaría también  el engaño respecto a supuestos niveles de licenciatura… una de contador público y las más demandada, de abogado. Y como ninguna de las dos existiera, hoy le puedo reafirmar la tesis del tahúr a cargo de una conducción que no puede llegar a buen puerto.

El poker jugado con la mayoría de los integrantes del Legislativo ha llevado a aquellos a rotundas equivocaciones o deliberadas pifias porque se trata de encuentros arreglados, de manos con la ventaja de contar con jugadores y jugadoras de nula moral y amplias ambiciones.

Perdemos todos. El desempleado, el anciano, el policía y el pensionado. Pierden los niños engañados y sin útiles escolares de parte del Estado, pierde la democracia, pierden organismos autónomos como el Instituto Electoral, más dependiente de la buena o mala voluntad del tahúr para tenerlos comiendo de su mano y dispuestos a facilitar sus planes que como podemos apreciar, tienen una versión personalísima de la democracia.

Veremos en el Pleno, el comportamiento de aquellos que ya cumplieron con aprobar el Presupuesto de Egresos 2013, pero en uno de los salones del Palacio Legislativo que no garantizan lo que en cambio la asamblea pública y abierta.

Los legisladores de casa podrían ahora sorprendernos y rechazar la propuesta modificada. Así nos tendríamos que adaptar al presupuesto 2012. Inmejorable para el inescrupuloso jugador. Productivo para esos politiquillos de poca monta, de interés bastardo y de mercenario desempeño, al son que les toquen.

Y no crea que de este nuevo emplazamiento entre poderes es ajena la Presidencia y el CEN del PRI.

El partido del mutismo

¿En qué se ha convertido el presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI?

En el seudo dirigente con más indolencia. Primero, para tender la mano solidaria al gobernador priísta de Tlaxcala, cuyo desempeño oscila entre rechiflas ante el Presidente, airadas acusaciones del Legislativo y multitudinarias protestas para echar abajo su manchiley.

Arnulfo Arévalo es el cero a la izquierda que de veras estorba en un partido-gobierno, nada más de membrete, que hoy vive de campañas idealizadas y triunfos  imaginarios porque el gran lastre marianista no le permite ni respirar.

Duele este partido, otrora magnánimo, pero hoy convertido en la bodega de manequíes polvosos y timoratos de ser colocados en un aparador medianamente digno.

Regresa el viajero

Tras una prolongada visita a Dubai -el destino turístico más caro del mundo- ha puesto el ex Héctor Ortiz, sus delicados pies en tierras tlaxcaltecas. Y lo primero fue concurrir a la Finca de Ocotlán, donde delegados de su PAC se comportan  como jaurías nerviosas, prestas a salir a ver qué encuentran mal acomodado.

Al PAN lo mermó hasta la médula. Hoy ha quedado como el club exclusivo de doña Adri, entre servidumbre sin chamba -porque las delegaciones les son arrancadas- y una membresía escasa, pues han quedado al desamparo del mecenas que los hizo gobierno, claro valiéndose de su registro.

Ahí lo tiene. Alzando la mano para que de nueva cuenta lo condene su más profundo crítico y persecutor. A dos años de reiterada metralla, ni lo ha encarcelado, ni lo tiene sometido en los incontables litigios. Ya veremos como les va en la nueva cita electoral para la cual se apuntan.