Nada debe el mandatario a su partido, el PRI… al contrario, hay señas de dejarlo morir en la elección de julio, pero ello no implica que Mariano haya dicho en reunión con su gabinete: “me haría feliz que José Antonio Álvarez Lima y Joaquín Cisneros, sean candidatos al Senado y ganen la elección de julio”.

Por aquello de, no te entumas, el ex gobernador Héctor Ortiz Ortiz porta el amparo concedido por la Justicia Federal, como si fuera su medallón de San Juditas, no vaya a ser que los apuestos y en forma (jeje) jovenazos del ballet de Alicia Fragoso, lo quieran hacer bailar algún vals en plena explanada de la Plaza del Bicentenario.

Acompaña a la solicitud de protección al Juzgado de Distrito, una denuncia en contra del titular de la Función Pública, Hugo René Carreto Temoltzin, en contra de la propia seño doña Licha Fragoso y también contra el secre de Finanzas (el muchachito fanfarrón) Ricardo García Portilla. Los tres, narra el ex mandatario, se han encargado de vituperarlo, escupirlo y cuando se puede picarle los ojos… desde el mismo fin de su mandato (como quien dice son unos gandallas).

Lo que son las cosas, verdad… una parte importante del gabinete marianista tiene la certeza de la tendencia de su patrón a los actos violentos, a la intimidación y, si en el inter se puede a claros actos de bullying, como hoy ocurre con el ex mandatario Héctor Ortiz.

A cada quien corresponde su ración de esa desgastante intimidación. Nada más que unos, como el aspirante panista a senador, tienen modo de tomar las cosas con calma tras gestionar su inseparable amparo, pero otros –insisto del propio gabinete- nomás ya no aguantan la presión.

Viera usted el ambiente tan hostil en el desayuno de ayer en Casa de Gobierno… vamos fue la enésima advertencia a todos los muchachos (jejeje) respecto a su inutilidad dentro del gobierno… no son sino piezas perfectamente sustituibles que, de hoy al viernes van a ver lo que es bueno por cuanto cortes de cabeza.

Al parecer la primera que va a rodar es propiedad de Noé Rodríguez Roldán, sobre quien usted y yo tenemos el antecedente de que ya trina por salir del palacio de los sufrimientos. Fíjese es quien durante más tiempo ha dejado correr la versión de sus deseos por convertirse en candidato a senador, y al mismo tiempo quien más ha padecido el dedo flamígero (de plano los chingadazos) de su amo… y todo por sentir los arrestos de priísta con derecho a cumplir un sueño.

Los chilaquiles que se sirvieron tenían un intenso sabor a hiel.

Y cómo no si entre los presentes comenzó a correr la versión de que otro con un pie afuera es el muchachito fanfarrón, el mismísimo Ricardo García Portilla, quien pudiera ser la rara (siempre tiene que ser así) apuesta de Mariano para sacrificarlo en el tercer distrito.

Me permito hablar de sacrificios porque con aquello de los arreglos desmesurados con el SNTE, esa demarcación política –alguna vez en los sueños de Blanca Águila Lima- está apartada, con un recordatorio enviado por la maestra Elba Esther Gordillo Morales, para su protegido José Carmen Corona Pérez, el dinámico y manipulador secretario general de la sección 31.

Ahí tiene usted, por lo menos dos pronósticos de guillotina, resultado de los acontecimientos del amargo almuerzo de ayer lunes en el feudo de Tizatlán.

Días antes, con motivo de fin de año, hubo un convivio semejante. Y las cosas no crea usted que fueron tan agradables.

Primero, el enésimo recordatorio del jefe de los marianistas, respecto a su nulo compromiso con el PRI, “no le debo nada, así que aquellos con ganas de contender, como van señores, de una vez quiero sus renuncias”.

Lo peor para los inquietos y talentosos políticos tricolores (yea) fue la sentencia marianista respecto a: “y ni piensen que va a haber apoyo del gobierno… ni un clavo, ahí se las arreglan ustedes si insisten en ir a la contienda de julio”.

Por eso, señores y señoras diputados priístas, ni se movieron… vamos, ni Lorena Cuéllar y su canto perenne de sufrimiento político, fue capaz de mover un dedo que ocasionara molestia en el Lord don Mariano. Tanto menos los funcionarios, sometidos –con el concurso del colaborador-funcionario más odiado de la historia, el michoacano Mario Armando Mendoza- al más terrible y humillante espionaje.

El gran hermano –con olor a carnitas en caso de cobre- tiene por ejemplo, tres agentes encargados de dar santo y seña de la procuradora Licha Fragoso. Reportan a dónde va, con quien se reúne, a qué hora toma sus alimentos y hasta dónde manda a comprar la carne (no vaya a ser que entre los retazos del caldito vaya escondido el mensaje del enemigo (jajaja).

Tome usted nota… si así se las gastan con la abogada del estado, qué no será de las demás capillitas, varios y varias de los cuales tienen en su agenda trasladarse a otros sitios, menos desagradables… sí, por qué no decirlo, como la ciudad de México y la posibilidad de adherirse a la causa de Beatriz Paredes, una de las principales benefactoras del bullying marianista, pues le sale gratis  recibir a bola de fans y colaboradores, aburridos de los fuetazos, golpes en la mesa, y los clásicos zapes, que hacen de este el gobierno más inverosímil a nivel global, por lo referente a malos tratos, hostigamiento, espionaje, humillación, malos salarios y hasta cooperaciones a la fuerza.

Ha usted de saber que en aquél convivio el señor manchis dejó perplejos a sus “invitados”, cuando les comentó lo siguiente: “yo sería feliz si José Antonio Álvarez Lima y Joaquín Cisneros Fernández, son candidatos del PRI y luego senadores de la República”.

Respecto a las diputaciones federales, quedó firme la idea del más cruel desinterés de quien debiera conducirse como promotor y patrocinador de su partido, vamos no se tiene registro alguno de un gobernador que anticipara de ese modo la derrota del instituto político por cuyos colores se alzó con el triunfo en un cotejo electoral.

La opinión pública

Estos últimos días, personal del Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE) bajo el mando de Luévano Sainz, aplicaría una encuesta en varias ciudades de Tlaxcala, con el propósito de establecer parámetros de simpatía hacia militantes tricolores, de cara a la elección de julio.

Nombres como el de Joaquín Cisneros Fernández, reafirmaron sus niveles de conocimiento entre los encuestados.

Sorprenden otros nombres como el de la diputada federal, Perla López Loyo, en esa búsqueda de perfiles susceptibles de hacer equipo con aquellos elementos en las preferencias de Mariano.

Hay que añadir que otros nombres, como el de Anabel Ávalos Zempoalteca y José Antonio Álvarez Lima, habrían generado opiniones muy favorables entre el universo encuestado.

Partiendo del despecho que mueve a Perla López Loyo, a operar en contra de Héctor Ortiz Ortiz, nos hallamos ante una súbita marianista con más rencor que base social para dar al tricolor un poco de competitividad –que no sea el amago de encarcelar precandidatos- ante la evidente ventaja de los albiazules.

De las duplas Joaquín-Perla, José Antonio-Anabel, es notoria la superioridad de la segunda, pues si en la ex orticista se nota el despecho, en Joaquín destaca la opacidad, desde los preparativos para la Feria de Tlaxcala, hasta las cuentas improvisadas, parcas e incompletas luego de la jornada.

El ex mandatario Álvarez Lima –quien ya tiene multitudinarias reuniones en su casa de Atlihuetzía- trae consigo el plus de ser distinto a Mariano, como no ocurre con Cisneros.

Para algunos fue un factor de derrota en 1998, pero en su historial, Álvarez Lima con nadie está peleado. A ello hay que sumar su visión social como político y la intensidad partidista alcanzada en su sexenio, cuando el PRI de plano no tuvo competencia y hasta abrió espacios a la oposición.

Tomando en cuenta la química con Anabel –su directora del DIF a lo largo de su sexenio- esta podría ser la mancuerna ideal del PRI, si realmente se propone a dar la batalla en julio. Creo que la dupla anterior, por la mala vibra que trae encima, sencillamente sería un suicidio para el tricolor.