Después de enfrentar su realidad y comprobar que sus grandes dotes de políticos sólo existen en su imaginación, porque los ciudadanos y las ciudadanas no les dieron nuevamente su confianza para ocupar otro cargo, seis diputados locales se reincorporaron a sus actividades para disfrutar por casi tres meses las mieles del poder y del dinero público.
Además de esos fracasos, habrá que sumar los que tuvieron aquellos partidos políticos que perderán el registro y que su aportación a ciertas coaliciones no significó nada como el Partido Encuentro Social Tlaxcala, el Partido Socialista y el Partido Verde Ecologista de México y otros que tuvieron su debut y su despedida como Impacto Social Sí, el Partido Encuentro Solidario y probablemente Nueva Alianza.
Los legisladores que retornaron a sus espacios en el inmueble de la calle Allende son, el morenista con casaca del Partido Encuentro Social Tlaxcala, el bisoño y limitado Miguel Piedras Díaz, quien sólo buscó la presidencia municipal de Apizaco para hacer el ridículo por el número de votos que logró sumar en la elección del pasado domingo.
Mayra Vázquez Velázquez, candidata de Morena a la alcaldía de Xaltocan, pensó que sólo por ir con ese partido ganaría los comicios, pero los ciudadanos y las ciudadanas le dieron la espalda y le recordaron que si en el 2018 ganó la diputación fue por el arrastre de Andrés Manuel López Obrador y no por sus nulos atributos de política.
La petista María Félix Pluma Flores hizo un monumental ridículo más en su vida. La joven no pudo conseguir la presidencia municipal de Tlaltelulco donde mal gobierna en la actualidad su torpe padre, Rubén Pluma Morales. Ambos entendieron que lo importante en política es la buena fama y el prestigio, ya que las carretadas de dinero público sí ayudan, pero no son determinantes para ganarse el respaldo del electorado.
Otra diputada local que tan luego conoció los resultados de la elección decidió regresar a la comodidad de su oficina en el Poder Legislativo fue María Isabel Casas Meneses que buscó la alcaldía de Tepeyanco por el Movimiento Ciudadano. Comprobó que lo suyo no es el convencimiento popular y que su única posibilidad de seguir en la política es a través de cargos plurinominales.
La engreída panista que se siente única y la más bella de la región, Leticia Hernández Pérez, fracasó en su loca carrera por llegar a gobernar el ayuntamiento de Santa Cruz Tlaxcala. Su candidatura nació muerta y sin posibilidades de meterse a la real competencia, pero su séquito de aduladores la engañaron y le hicieron creer que podía ganar, lo cual nunca pasaría porque su trabajo político en el municipio es inexistente y su actitud de soberbia y de perdonada vida nadie la tolera, incluso los militantes del PAN de esa población.
El morenista Víctor Manuel Báez López que terminó siendo chalán de los Ortiz al ser candidato del PAC a la presidencia municipal de Zacatelco tiene atrofiado el olfato político. En el 2018 recibió el impulso de Lorena Cuéllar Cisneros para ser abanderado a diputado local, posición que ganó pero que la utilizó para ponerse a las órdenes del ambicioso ex gobernador José Antonio Álvarez Lima, quien emprendió una campaña de desprestigio contra la hoy gobernadora electa y ex delegada de la poderosa Secretaría de Bienestar del gobierno federal de López Obrador.
Víctor Manuel Báez le alzó la mano a la adversaria de Cuéllar Cisneros, la priista Anabel Ávalos Zempoalteca, abanderada al gobierno de Tlaxcala por la coalición “Unidos por Tlaxcala”, acción que difícilmente olvidarán los dirigentes de Morena y la próxima inquilina del Palacio de Gobierno.
En otro espacio y momento le comentaré quienes son los vividores y ganadores de las elecciones porque sin mucho esfuerzo tal vez lograrán ciertas posiciones de poder que los mantendrán vigentes por otros tres años más.
Este día se llevarán a cabo los conteos oficiales de las elecciones y el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones deberá aplicarse porque su deficiente trabajo y falta de operación está provocando focalizados conflictos que podrían extenderse si no demuestra que los comicios fueron limpios y legales.
En Santo Toribio Xicohtzinco, Muñoz de Domingo Arenas y Tzompantepec hay serias inconformidades con los resultados, lo cual también se hizo patente en el importante e influyente municipio de Apizaco, donde diez candidatos a la alcaldía no están dispuestos a reconocer el triunfo del panista Pablo Badillo Sánchez.
Los contendientes Juan Bernardo López Alducin (PRD), Ana Karen Hernández Vázquez (FxM), Reyes Ruiz Peña (PT) , Gabriela Muñoz Guevara (Nueva Alianza), Soraya Noemí Bocardo Phillips (PVEM, Ricardo Morales Cruz (PES), Jorge Domínguez Ramírez (RSP), Rafael Álvarez Escárcega( Morena), David Velázquez Rugeiro (Independiente) y Luis Guillermo Ramírez Rojano (MC) se quejan de la ilegal la compra de votos, el desvío de recursos públicos y el uso indebido del personal del ayuntamiento para fines proselitistas.
Mañana jueves están convocando a una marcha de protesta que se realizará por la tarde y arrancará en La Maquinita. El objetivo es recorrer varias calles de la ciudad rielera y mostrar el rechazo ciudadano al triunfo del PAN. Ahí se verá si hay o no respaldo y si el conflicto es real o sólo se trata de un arranque de enojo de los organizadores.
Habrá que ver.
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