Algo raro pasó en las elecciones del domingo porque hay una proyección que no se cumplió y que hasta ahora nadie del equipo cercano de la próxima gobernadora de Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, ha explicado o justificado, pues Morena no arrasó en los comicios para alcaldes y presidentes de comunidad.
Los tlaxcaltecas decidieron mostrar sin tapujos su respaldo a la candidatura de Lorena Cuéllar que ganó contundentemente la gubernatura, también lo hicieron para que la Cuarta Transformación retuviera el control de las tres diputaciones federales y la mayoría en el Congreso del Estado al obtener trece de quince posiciones de mayoría.
Los números en esas tres elecciones son claros y reflejan que los ciudadanos y las ciudadanas siguen apoyando al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, así como su proyecto de la Cuarta Transformación que impulsa en el país a través de Morena y sus aliados.
En la elección de diputados locales, destaca la reelección de Miguel Ángel Covarrubias Cervantes, quien logró repetir en el cargo ahora bajo la casaca del PT, porque en los comicios del 2018 consiguió la victoria portando la del PRD. Hizo la hazaña y se convirtió en el primer político del estado en alcanzar esa anhelada y complicada meta.
Muchos podrán estar o no de acuerdo con sus métodos y su operación, pero Miguel Ángel Covarrubias ha demostrado ser un buen operador a ras de tierra y también un excelente jefe político de su clan, debido a que en las elecciones del 2016 logró heredar el cargo de alcaldesa de Texoloc a su mamá Maribel Cervantes Hernández, quien a su vez hizo lo propio a su otro hijo Arturo Covarrubias Cervantes que ganó los comicios del domingo.
El respaldo de los tlaxcaltecas hacia Morena no se reflejó ni se vio en las elecciones de alcaldes y presidentes de comunidad, pues hasta anoche los resultados que se estaban obteniendo dibujaban una pluralidad en donde el partido de López Obrador tenía asegurado el triunfo en 13 ayuntamientos, pero el PAN, el Verde Ecologista, el PRI, Nueva Alianza, el PRD, el PAC, el PS y otros partidos también venían sumando triunfos importantes.
Morena no pudo alcanzar el objetivo de tener el control de la mayoría de los 60 municipios de Tlaxcala, es como si “alguien” se hubiera equivocado en la designación de los candidatos a esos cargos, porque sencillamente los electores y las electoras decidieron llevar al poder a otras propuestas.
Los números y la meta que tenía Morena y sus aliados en las elecciones del pasado domingo era conseguir entre 40 y 50 ayuntamientos, sin embargo no sólo se equivocaron en sus proyecciones, sino que fracasaron porque entregaron malas cuentas.
En las elecciones para presidentes municipales es donde se esperan conflictos, pues en algunos lugares se han detectado irregularidades que ponen en duda la veracidad de los resultados, como en Tzompantepec en donde ya se comprobó que metieron votos de más a las urnas y que los funcionarios de casilla se equivocaron al contar los mismos para perjudicar al aspirante de Morena, Víctor Castro López, quien ha recuperado sufragios que no se le habían acreditado.
En Xicohtzinco un grupo importante de vecinos de esa población desconoció anoche los resultados electorales que dieron el triunfo al perredista Luis Ángel Barroso Ramírez y exigió a las autoridades anular los comicios y convocar a elecciones extraordinarias.
El miércoles o jueves de esta semana cuando concluyan los cómputos finales de las elecciones se podrá tener una idea clara si habrá o no conflictos postelectorales y en qué municipios o comunidades, porque en lo que se refiere a los comicios para la gubernatura y para las diputaciones federales y locales el asunto parece estar resuelto porque los candidatos y las candidatas que perdieron ya reconocieron su derrota.
Ahora sólo resta esperar y ver que se confirmen los triunfos para tener con precisión quiénes serán los nuevos protagonistas de la vida política de Tlaxcala.
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